El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha defendido hoy la necesidad de las reformas que está emprendiendo su Ejecutivo y ha considerado que quienes se oponen a ellas están instalados en el inmovilismo y sería irresponsable hacer caso a las voces que, ante la situación actual, piden no hacer nada.
Rajoy ha reprochado esas actitudes en su intervención en el acto organizado por el PP en Oviedo en apoyo a la candidata del partido a la presidencia de Asturias, Mercedes Fernández, en las elecciones del próximo 25 de marzo.
El jefe del Ejecutivo, que en varias ocasiones a lo largo de su discurso ha dejado claro que va a seguir haciendo todas las reformas que considere necesarias, ha señalado que en ellas está el futuro.
«Quienes se oponen a las reformas, quienes dicen que no les gustan, quienes se oponen a todo, están en el inmovilismo, y yo aceptaré todo, pero lo único que no puedo aceptar, porque sería una irresponsabilidad, es que se me diga que no haga nada, porque eso es lo peor en estos momentos y conduce inevitablemente al fracaso», ha advertido.
Rajoy ha recordado que su Gobierno aún no ha llegado a cien días y ya ha comenzado a sentar las bases del futuro de la economía.
Y lo ha hecho, según él, no pensando en las próximas veinticuatro horas, sino en el largo plazo, y, por ello, es necesario tomar medidas ahora «porque si no se siembra, jamás se va a cosechar nada».
Tras enumerar muchas de las decisiones que ha ido adoptando en este tiempo se ha preguntado: «Qué quieren? ¿Que no haga nada?».
A su juicio, hay que adoptar decisiones porque no se pueden resolver problemas con recetas antiguas, algunas de ellas de más de treinta años, que ya no sirven.
Rajoy ha vuelto a dejar claro que él no ofrece «un Gobierno milagroso» ni ningún tipo de «varita mágica», y que lo que va a seguir haciendo es decir la verdad.
«Luego ya veremos lo que podemos y no podemos hacer», ha explicado.
El jefe del Ejecutivo a señalado que el PP es un partido al que los españoles llaman cuando existe una situación de dificultad, y tras mostrarse orgulloso por ello, ha dicho que va a hacer lo que el país necesita.
En ese contexto ha enmarcado decisiones como la que va a permitir el pago de las facturas pendientes que tienen muchas administraciones con proveedores o la adoptada ayer por el Consejo de ministros para eliminar una serie de organismos y fundaciones que no tenían actividad.
Una medida que ha subrayado que no se atrevió a adoptar el PSOE pese a que «presume» de izquierdas, como tampoco fue capaz, según ha recordado, de limitar el sueldo de los ejecutivos de entidades financieras que ha recibido ayudas públicas.
Entre las próximas leyes que aprobará el Gobierno, ha recordado la que facilitará la actividad de los emprendedores, y ha reiterado la intención de revisar la legislación para simplificar muchas de las normativas existentes.
Rajoy ha expresado su total apoyo a Mercedes Fernández en su aspiración de ser la próxima presidenta de Asturias y ha señalado que el Principado no puede «convertirse en una isla en la España del cambio».
Para el jefe del Gobierno, los socialistas no se merecen gobernar Asturias después de la gestión que han realizado durante muchos años y «otros», en alusión a Francisco Álvarez Cascos, han dilapidado la confianza que le dieron los ciudadanos.
Reformes, sí (Senat, diputacions, missions militars, etc.), més impostos, no i no. Mentres puguin extreure'ns impostos, els polítics no reformarán res i encara menys el seu status i benestar.