Un hombre, de 48 años, Luis Cambal, falleció en la provincia leonesa por una rotura de aorta después de permanecer en lista de espera durante nueve meses en el Hospital de León para que le practicaran una operación de aneurisma de dicha arteria.
La familia del paciente y su abogado preparan una reclamación patrimonial contra la Junta de Castilla y León por este motivo, informa hoy El País.
El paciente fue diagnosticado de aneurisma de aorta el 10 de mayo de 2012 y falleció por una rotura de esta arteria el 21 de febrero de 2013.
La Consejería de Sanidad ha reconocido hoy, en una nota de prensa, que el paciente estaba diagnosticado de aneurisma de aorta ascendente y que estaba incluido «en lista de espera quirúrgica» desde el 10 de mayo de 2012 «como no urgente».
También señala que la operación del paciente llegó a estar programada para enero de 2013, pero «fue suspendida como consecuencia de urgencias quirúrgicas en pacientes ya ingresados en la unidad coronaria».
La consejería ha explicado que los pacientes en espera son valorados en función de su prioridad y que este hombre, que utilizó en dos ocasiones el teléfono que tenía disponible en el hospital, la última el pasado 11 de febrero, manifestó que estaba «asintomático».
Según la misma nota, el tipo de trastorno que presentaba el paciente, sin síntomas de carácter cardiológico y sin hipertensión pulmonar ni enfermedad coronaria asociada, es considerado «de menor riesgo que otras valvulopatías».
Por ello, clínicamente «se consideró de menor prioridad que otras valvulopatías, aunque comparta el mismo código de prioridad», según la nota de prensa.
Por su parte, Laura, hermana del fallecido, ha explicado, según el citado periódico, que, además del fallo en el hospital, hubo errores importantes, ya que cuando se empezó a encontrar mal, la médica de cabecera le diagnosticó una «indigestión» y lo mandó para casa.
Volvió a las ocho horas a urgencias al Hospital del Bierzo, en Ponferrada (León), donde tras cuatro horas de espera se dieron cuenta de lo que pasaba y decidieron derivarle al Hospital de León porque en el primero no había servicio de cardiología.
Sin embargo, una hora después, cuando quiso ser trasladado en ambulancia el hombre falleció por el camino.