El presidente del Eurogrupo, Jeroen Djisselbloem, dijo ayer que nada hace pensar que la banca española deba prolongar el programa de asistencia financiera que concluye en diciembre, al mismo tiempo que pidió más reformas laborales y trabajo «más duro» y prolongado.
Durante su intervención en el Nueva Economía Fórum, patrocinado por Red Eléctrica, BT y Asisa, Djisselbloem reconoció que España ha empezado a «pasar página» y ha entrado en el camino de la recuperación.
Frente a sus homólogos europeos, indicó, la banca española muestra importantes ventajas, en parte gracias a los exhaustivos análisis a los que se ha sometido; por ello, cuando se evalúe a finales de año el programa de asistencia financiera, su resultado será positivo.
Dijsselbloem elogió el esfuerzo y las medidas «nada fáciles» que ha adoptado España para salir de la crisis y cumplir con el programa de consolidación fiscal, aunque advirtió de que son necesarias más reformas laborales que hagan más dinámico el mercado de trabajo y modernicen la contratación.
El también ministro de Finanzas de los Países Bajos lamentó el elevado desempleo juvenil, «el doble que el general», y añadió que frente al envejecimiento de la población habrá que «trabajar más largo y más duro», en referencia al alargamiento en la edad de jubilación.
Asimismo, cree que hay que compaginar políticas de crecimiento en la zona euro con el mantenimiento del modelo social, aunque alerta de que todos los países deben seguir haciendo reformas estructurales para «adaptarse a la nueva realidad económica».
En este sentido, recordó que la implementación de cambios estructurales haría que el crecimiento de la UE aumentara entre un 5 % y un 10 % más.
Djisselbloem valoró que el magnate estadounidense Bill Gates haya invertido en la constructora española FCC porque es un dato positivo, que hace que Europa empiece a tener gran interés por España.
«Gates sabe lo que hace», aseveró.