El viento y la bajada de temperaturas han favorecido las labores de extinción a lo largo de la noche en el incendio que ya ha quemado 12.000 hectáreas de la isla de Gran Canaria, según ha confirmado el presidente canario Ángel Víctor Torres.
«Las temperaturas han bajado y, si todo va bien, hoy será un día en el que puedan darse muy buenas noticias a la sociedad porque la noche nos ha dado un excelente respiro», ha indicado el jefe del ejecutivo autonómico en una entrevista en la Cadena Cope recogida por Europa Press. En la zona han trabajado durante las últimas horas más de 1.000 efectivos más los medios aéreos.
Torres ha expresado, además, su confianza en que parte de las 10.000 personas que han sido desalojadas puedan volver a sus casas a lo largo de la jornada de hoy. El presidente ha admitido que en la noche de ayer la situación era «incontrolable» después de que el fuego avanzase hacia el sur y en el norte existía riesgo constante de rebrote.
En relación con ello, ha señalado a través de su cuenta de Twitter, que los técnicos le han trasladado, tras visitar en la noche las zonas, que «el incendio remite», así como que no ha entrado en la zona protegida de Inagua, algo que se temía, y «pierde potencial».
Asimismo, ha explicado que los daños en el parque natural de Tamadaba son menos importantes de lo que se temían. «Los técnicos nos han dicho que los daños parecen notablemente inferiores de lo que se preveía, parece una quema controlada, pese a que es una zona prácticamente imposible de atacar en la que las llamas eran de más de 50 metros».
Sobre el origen del fuego, Torres ha asegurado que existe una línea de investigación, aunque todavía es pronto para realizar concreciones. «Hay una línea de investigación abierta y en la mayoría de los casos el ser humano es responsable, bien por una temeridad o imprudencia o por un acto deleznable», ha indicado.