El Ministerio de Hacienda está estudiando medidas adicionales para prolongar los plazos de presentación de impuestos a pymes y autónomos, que se sumaría a la moratoria de seis meses para el aplazamiento de impuestos ya aprobada para estos colectivos, y a la moratoria del pago de cotizaciones a la Seguridad Social sin intereses también de seis meses, como medidas de choque ante la crisis de la COVID-19.
«Seguimos estudiando alguna cuestión para que los plazos se puedan prolongar y no haya dificultades a la hora de la presentación», ha adelantado Montero en una entrevista en Antena 3 emitida este miércoles, tras haber recordado que ya se ha establecido una moratoria para pymes y autónomos que permitirá no pagar los impuestos y aplazarlos durante seis meses en el caso del IRPF, IVA o Sociedades.
Montero ha insistido en que la decisión de que autónomos y pymes puedan retrasar el pago de impuestos «es una medida ya adoptada», si bien se está estudiando «alguna cuestión» para «otro tipo de fiscalidad».
Fuentes del Ministerio de Hacienda han confirmado a Europa Press que se trata de medidas adicionales para la prolongación de los plazos de presentación de impuestos para pymes y autónomos, cuyas organizaciones han venido reclamando en las últimas semanas el aplazamiento dadas las dificultades ante la crisis sanitaria de Covid-19.
Estas nuevas medidas de prolongación de los plazos se sumarían a la moratoria de seis meses, los tres primeros sin intereses, aprobada a mediados de marzo para el aplazamiento y fraccionamiento de impuestos de autónomos y pymes, y a la moratoria de las cuotas a la Seguridad Social, también de seis meses, aprobada a finales de marzo para empresas y autónomos.
En este sentido, Montero ha afirmado que hay que ayudar a los sectores de actividad que hayan experimentado caídas, si bien ha matizado que no han sido «todos», puesto que «algunos sectores se mantienen e incluso algunos en este momento han tenido crecimiento».
LAS ARCAS PÚBLICAS NECESITAN UNOS «INGRESOS MÍNIMOS»
Por ello, ha recordado que las arcas públicas precisan de unos «ingresos mínimos» para pagar las prestaciones por desempleo, los ERTE o las ayudas al comedor, con el fin de que «nadie se quede atrás y todo el mundo pueda cobrar todo a lo que tiene derecho».
La portavoz del Gobierno ha lanzado un mensaje de «tranquilidad» y ha pedido que «no se preocupen las empresas» porque en el Ejecutivo conocen «perfectamente su situación», al tiempo que ha recordado que se ha puesto en marcha un mecanismo de liquidez para que puedan hacer frente a sus compromisos «ineludibles», así como una moratoria para el pago del alquiler.
«Hay un conjunto de medidas en las que la Administración está en este momento volcada para que las prestaciones lleguen lo antes posible, que supone un volumen muy importante», ha dicho Montero, quien ha remarcado el «especial interés» por las personas vulnerables, como los despedidos o los trabajadores con contrato temporalmente suspendido, para que puedan mantener su economía doméstica.
«No podemos generar más desigualdad, todo lo contrario, hay que intentar prevenirla e intentar quitar alguna de la que existía previamente», ha añadido.
LA CAMPAÑA DE LA RENTA ES «FRANCAMENTE BENEFICIOSA»
En cuanto a la Campaña de la Renta, que se inició hace una semana y durará hasta el próximo 30 de junio, se ha mantenido porque es «francamente beneficiosa para el conjunto de contribuyentes», ya que permitirá que la «gran parte» de ellos reciban dinero al serles devuelto por parte de la Agencia Tributaria los ingresos correspondientes al año 2019.
Aunque un «grupo» de contribuyentes tendrá que pagar, la «gran parte» recibirá recursos, ha resaltado Montero, quien ha destacado que este año de forma «sorprendente» se ha presentado buena parte de las solicitudes en los primeros días ante la expectativa de los ciudadanos de cobrar los ingresos de la Renta.
EL LUNES TERMINA LA «HIBERNACIÓN» DE LA ECONOMÍA
La portavoz del Gobierno ha afirmado también que el próximo lunes termina la «hibernación» de la economía, ya que la restricción de las actividades no esenciales durante dos semanas, aprobada mediante el permiso retribuido recuperable, concluye este miércoles y ha sido una medida «eficiente» para bajar la movilidad y reducirla hasta los niveles del fin de semana.
De esta forma, ha indicado que el próximo lunes, 13 de abril, en la mayoría de las comunidades autónomas, salvo aquellas en las que sea festivo, se incorporarán a sus trabajos las personas que se definieron como no esenciales, si bien permanecerán las medidas de teletrabajo, distancia en los lugares de trabajo, dispensación de higiene para el lavado de manos y los equipos de protección para la seguridad de trabajadores y la población.