El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comparecido este miércoles en el Congreso de los diputados para solicitar la prórroga del estado de alarma y rendir cuenta de la labor del Ejecutivo en esta crisis.
Ha destacado que «hemos superado el momento crítico de esta pandemia de coronavirus, pero no podemos bajar la guardia. Cada vida perdida nos recuerda la obligación de seguir trabajando».
Sánchez ha explicado que es la tercera vez que la pide, pero es la primera vez «que la pido con una visión optimista. España se ha reinventado en estas semanas. Podemos empezar a diseñar el próximo escenario que es la desescalada». Aunque ha remarcado que «cualquier optimismo tiene que ir acompañado de la prudencia. Desde el Gobierno seremos tremendamente cautelosos y prudentes».
Además, ha asegurado que «esta extensión del estado de alarma no será la misma, las reglas y el alcance variarán. En la segunda mitad de mayo se fijará el horizonte de desescalada. Va a ser lenta porque tiene que ser segura».
Sánchez ha explicado que en esa fecha se irán modificando las condiciones del estado de alarma y siempre con la premisa de «mantener a salvo el sistema de salud».
El poder del Ministerio de Sanidad
También ha destacado que en la solicitud de la nueva prórroga hay dos modificaciones: el desconfinamiento de los niños y la habilitación del Ministerio de Sanidad para modificar, ampliar y restringir las medidas permitidas.
Así, el Gobierno habilita al ministro de Sanidad, Salvador Illa, a dictar órdenes e instrucciones que podrán ser diferentes en función de los territorios con respecto a las limitaciones actualmente vigentes sobre los únicos desplazamientos permitidos a las personas, pero también sobre la actividad comercial y la apertura de negocios, bares y restaurantes, y lugares de ocio y cultura como museos, bibliotecas o espacios de espectáculos.
En el Pleno del Congreso de los Diputados que deberá autorizar esta nueva solicitud de ampliación del estado de alarma, Sánchez se ha felicitado de que, por primera vez, acude a la Cámara Baja en medio de un «escenario prudentemente optimista», lo que permite que «a lo largo de las próximas semanas» y teniendo como horizonte la segunda mitad de mayo para entrar en la llamada fase 2 de relajación de las medidas, entre el 26 de abril y el 9 de mayo las reglas y limitaciones vigentes sobre desplazamientos y actividad comercial puedan ir variando.
Ahora bien, todo alivio en las medidas de confinamiento, ha advertido, deberá ir acompañado de la «necesaria prudencia». Es más, ha adelantado de que en función de cómo vaya evolucionando la epidemia, se darán «pasos hacia adelante» o «hacia atrás».
Los paseos de los niños
«Este es un Gobierno que escucha», ha manifestado el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, al explicar en el Congreso la decisión de aliviar el confinamiento a menores de 14 años para que puedan pasear con sus padres, y ha admitido que el Gobierno pecó «de prudencia» a la hora de acordar esta medida.
«Es verdad, pecamos de prudencia, nuestros hijos lo son todo», ha remarcado Sánchez en la única alusión que ha hecho ante el pleno del Congreso a la polémica generada por la decisión adoptada en un principio de permitir a los niños salir solo a hacer recados con sus progenitores, para después autorizarles a paseos acompañados.
En este sentido, ha apuntado que el comité de científicos y expertos que asesoran al Gobierno ha pedido sobre este levantamiento de las restricciones para los niños «que lo hagamos con la máxima cautela», y ha añadido que «tras las deliberaciones» posteriores se ha acordado que puedan dar «paseos controlados» desde el próximo domingo, 26 de abril, cuando arrancará la tercera prórroga del estado de alarma.