Es una vergüenza que el agua no esté fría y a cuatro euros la botella en los partidos de la UD Ibiza. Tendría la UD que mirar a quién dan la concesión de los bares móviles del campo. No tienen ni idea y esos precios abusivos son de vergüenza. El pasado sábado, en el partido contra el Granada, los refrescos también estaban sin frío, a temperatura ambiente en una jornada en la que se sobrepasaron los 40 grados y había alerta máxima por altas temperaturas.
Más currar y mirar por el buen servicio al aficionado y no tanto los organizadores de las barras a llenarse los bolsillos.