El Ayuntamiento de Sant Josep ha aprobado en esta semana una subida del precio del agua. El incremento medio asciende a 15,3 por ciento, tanto si es agua desalada como agua de pozo. La subida fue aprobada gracias al voto de calidad del alcalde, Josep Marí ‘Agustinet', ya que Guanyem no apoyó la medida, al igual que PP y Alternativa. El propio concejal de Obras y Agua, Angel Guerrero, admitió que subir el precio del agua antes de las elecciones era «pegarse un tiro en la cabeza». Desde que se aprobó esta medida las muestras de indignación se han sucedido. El agua de Sant Josep, como admite el propio Ayuntamiento, no tiene una calidad mínima, pero costará un 15,3 por ciento más a los habitantes del municipio.
Dimitir. Quizás es el momento de recordar unas palabras de Josep Marí ‘Agustinet' a la cadena Ser. ‘Agustinet' declaró que se plantearía dimitir si no solucionaba el problema del agua en un plazo de tiempo razonable. «No tiene que ser exactamente en un año, pero sí en un periodo de tiempo razonable, porque en política hay que ser valiente y ese fue mi compromiso en campaña electoral. Si no lo arreglo no merezco ser alcalde del municipio», declaró ‘Agustinet'. Hace poco más de dos meses, el alcalde de Josep Marí volvió a dar muestras de su optimismo sobre el tema del agua y dijo que en junio sería de calidad. No parece que esa promesa tampoco pueda cumplirse.
Un grave error político. La subida del precio del agua no tiene justificación alguna, y menos un incremento que supera el 15 por ciento. Se puede endulzar la medida anunciando que los grandes consumidores serán penalizados (el típico mensaje populista para contentar a las masas) pero la realidad es que la subida será generalizada y todos los habitantes de Sant Josep deberán pagar mucho más por un servicio muy deficiente. Quizás hay que seguir recordando a ‘Agustinet' su compromiso de dimitir si no conseguía agua buena para Sant Josep o pedirle que dé marcha atrás a la medida aprobada hace una semana en el pleno. Es una inmoralidad pagar más por un agua que no cumple las mínimas condiciones de consumo, pero lo llamativo es la facilidad que tiene ‘Agustinet' y su gobierno en meterse en follones cada dos por tres. Estas cosas suelen acabar muy mal.