El aeropuerto de Ibiza ha registrado en febrero un 19,5 por ciento más pasajeros que en el mismo mes del año anterior. No es un dato menor, ya que supone que en plena temporada baja, cuando apenas hay hoteles abiertos y la actividad turística es residual, siguen llegando viajeros, muchos de ellos residentes españoles (un 20,9 por ciento más) mientras los internacionales registraron un incremento del 9,5 por ciento. Desglosando estos datos por mercados, según los datos aportados por Aena, España es el que más pasajeros registró. Le sigue Holanda y Reino Unido, respectivamente, con 5.571 viajeros (+17,6%) y 4.124 (+4,6%). Los pasajeros registrados en lo que va de año suman 334.817, lo que supone un 18,3% más que los que se contabilizaron en la suma de los meses de enero y febrero del año anterior.
Temporada baja.
Estos incrementos son significativos por cuanto tradicionalmente la actividad en el aeropuerto de es Codolar en invierno ha caído a mínimos históricos. Sin duda, gran parte de este incremento está relacionado con la celebración de los cursos de formación de los trabajadores de la automovilística Mercedes Benz, que ha supuesto una importante reactivación económica en plena temporada baja. Los eventos de estas características deben suponer para Ibiza un aliciente para muchas empresas y hay que seguir trabajando en esta línea. Parece que el Consell d'Eivissa es consciente de ello y seguirá buscando empresas que quieran venir a la isla a presentar sus productos o a realizar sus actos formativos o sus congresos en temporada baja en años venideros.
Alargar la temporada.
Si finalmente se consiguen reactivar los vuelos con Alemania en temporada baja, como planteó Vicent Torres en Berlín la semana pasada, Ibiza puede conseguir poco a poco un objetivo perseguido durante años: la desestacionalización. Hay que seguir en esta línea, es decir, que los hoteleros tengan alicientes para abrir en meses en los que tradicionalmente han cerrado. Al final, tanto empresarios como trabajadores se beneficiarán de este cambio de tendencia. Los datos del aeropuerto invitan al optimismo.