Desde hace unos días Eivissa (y Balears en general) ha dejado de ver tres canales de TV3. Uno de ellos, 3/24, ofrecía noticias las 24 horas del día. El otro, dibujos animados. El tercero, Canal 33. La supresión de estos tres canales, con una audiencia mínima, obedece a una decisión técnica ya que no había espacio para todos y, o bien había que suprimir los dos canales catalanes, o había que renunciar a IB3 en HD. Algunos ven en esta supresión un motivo político, pero me consta que los inconvenientes técnicos pesan más que los políticos. Como en otras cosas, ha faltado inteligencia desde el Ejecutivo balear para explicar la decisión. Sin embargo, conviene aclarar algunas cosas importantes ante el desconocimiento general. IB3 no se puede ver en Catalunya porque costaba muchos cientos de miles de euros al año y no había presupuesto para afrontar este coste. Tampoco el número de televidentes que miraban IB3 en Catalunya justificaba este gasto. Curiosamente, TV3 no se hacía cargo del coste de la reciprocidad a pesar de que su presupuesto multiplica por diez el de la televisión balear. Todo lo pagaba IB3 hasta que su presupuesto fue reducido a la mitad. Por otro lado, no es cierto que el Govern o IB3 capen el contenido de TV3 en Balears. La señal que llega es la internacional porque, entre otras cosas, TV3 paga películas y partidos de fútbol solo para el territorio catalán, por su población, y no para otro territorio que, como el balear, superan el millón de habitantes. Intenten ver un partido del Barça a través de la web o una película. No podrán. Solo tienen acceso las personas que viven en Catalunya. Sé que el tema de TV3, y sobre todo el del catalán, levanta pasiones, muchas veces vehementes, pero hay que explicar las cosas como son y no inventarse historias que no son. Aún así, que busquen una solución porque cuanto más canales, mucho mejor.
OPINIÓN | Joan Mestre
El lío de las teles
Juan Mestre | Eivissa |