Atención todos y todas!. Miembros, «miembras» y partidos desmembrados. El cambio climático ya está aquí ¡Y en la peor de sus facetas!. - ¡Que digo en la peor! Ni el mismísimo Georgie Dan lo supera con su barbacoa, por mucho empeño que le ponga su afrenillada voz al salir de entre su radiante dentadura postiza. Ya lo dicen en la caja tonta y en el foro del cambio climático de París. Los polos se derriten y solo se podrá comer comtessa de frigo y tarta de crocanti al whisky envasadas al vacío. ¡Eso sí! al menos pan y circo al lumpen. O sea: a los de abajo. A los que vivimos pendientes de los cambios. Los climáticos, los sociales, los laborales y claro está, los políticos. Y así está el asunto que se derriten los polos por el caloret y se ahogan los corruptos, que mueren por la inundación que provoca la asfixia en sus cuentas bancarias, fruto de alguien que no quedó contento con el reparto y se fue de la lengua. Favor que nos hacen. Que ya sabemos todos ese dicho, que dice que Dios solo aprieta pero no ahoga. Imagino que porque al que se le ocurrió la frase, que debió ser Noé, no se le ahogó en el diluvio ningún bicho que echara en falta en la Tierra, si bien probablemente porque cuando cerró las puertas del arca se olvidó meter de forma premeditada y subrepticia dentro, a un gran número de animales, principalmente al hombre y a la «hombra», o a la mujer y a la «mujera», como prefieran llamarlo en términos de igualdad «pesoística» y «podemita» algunos, de los cuales, al primero se le debe el gran honor de abrir el melón de la igualdad de sexos a base de jugar al Scrabble con eso de cambiar palabras . (Bueno. También abrió, allá por el 2009 el melón de la financiación autonómica de Cataluña, del que se sintió orgulloso su secretario general y presidente, Zapatero, tras lo cual, hoy, de esos polvos vienen hoy esos lodos). La memoria y el recuerdo duelen mas a los que se creen impunes.
Está claro, que sin lugar a dudas algo está pasando en el planeta, porque es evidente que ya no * «plou» aunque sí «fa sol» , sino también, porque últimamente «ses bruixes se pentinen» más que nunca. Y eso, para aquellos que tengan dudas, es sin duda (no lo duden), debido al «caloret». ¡Sí! Al caloret. Ya saben: el caloret. Eso que produce un bienestar ataráxico a los sentidos y que te pega un subidón cuando te crees el rey del mundo - The kign of the world, como dijo Cameron (no confundir con Camarón, el hecho a la plancha por supuesto, que está más rico aunque no cante), cuando le dieron el Oscar por las once estatuillas en el 97, por la historia de un barco que se pega un piñazo, no con un seat panda como creen algunos jóvenes de la new hipster age, sino como consecuencia de los efectos del deshielo provocados por el cambio climático, porque han de saber ustedes, que el asunto ya viene de largo corrido, pues es tal la tontería humana de pifiarla con todo tipo de climas y climax, que tales temas vienen desde los primeros inicios de la revolución industrial, ya desde finales-principios del XIX-XX. ¡Sí! ¡Sí!, ¡Crean me ! Se lo juro por el efecto beneficioso que tiene para todos los isleños, el llevar a cabo votaciones amañadas con el fin de que algunos incautos, se dejen convencer por unos pocos abrazafarolas, de que van a dilucidar el futuro de nuestras carreteras, de nuestros impuestos turísticos por imperativo legal, por la mejora de nuestra isla, en definitiva «des nostro poble». Y todo eso, han de creerme, es debido al caloret. ¿Será que el cambio climático, así como el cambio del comportamiento de las costumbres de los humanos, su contaminación y su posterior contagio, no es más bien un efecto atribuible a la menopausia que provoca la postergación eterna en el poder, de algunos miembros y miembras, desde hace decenios, y que les hace subir los calores y decir y hacer cosas que éticamente no se deben, y que los culpables de la transgresión y de la ola de sinvergonzonería que está recorriendo este país, se reúne en los campos de futbol con césped artificial, en donde se dan más pelotazos que en el mismísimo estadio de San Mamés al ritmo del caloret?
No lo piensen. Es sin duda el caloret que derrite cerebros y pervierte conciencias. Noé no se olvidó del ser humano. Echó la pasarela abajo de una patada en cuanto los vio aparecer, y cerró a cal y canto el mamparo, con el fin de que no pudiese pervertir al resto del pasaje. Pero se le colaron por la puerta trasera. Sin duda aquella que daba al campo de futbol del Arca y donde el ser humano desarrollo su cultura como mejor sabía y sabe hacer: la cultura del pelotazo.
* Plou i fa sol. Ses bruixes se pentinen. Dicho popular.