Con el primer sonido pirotécnico se hacía el silencio en la playa de Ses Figueretes. La enorme expectación llegaba a buen puerto y centenares de personas alzaban sus miradas durante poco más de quince minutos para disfrutar del tradicional castillo de fuegos artificiales.
Durante este rato las miradas se centraban en disfrutar de las figuras y formas que formaban los más de 150 kilos de pólvora que se lanzaba al cielo de la isla. De esta manera se daba un cierre mágico a la edición de este año de las Festes de sa Terra. Y la gente ha respondido en masa llenando, como ya es habitual, la playa de Ses Figueretes por completo. Tanto la playa, como el paseo marítimo estaban abarrotados. Y es que nadie quería perderse una de las noches más espectaculares y mágicas que ofrecen tanto la ciudad como la isla de Ibiza. El espectáculo pirotécnico volvió a ser ofrecido desde la propia playa de Figueretes, y no desde la Illa de Ses Rates, como se hacía anteriormente.
Desde la propia playa la magia se hizo en el cielo, con una combinación de figuras de grandes palmeras, cometas, resplandores o peonías – explosión en forma de globo que cambia de color –. Un espectáculo que terminaba con una impresionante traca final de luces y sonido. Cuando el espectáculo cesó, la multitud rompió a aplaudir, emocionada por el espectáculo, que ponía el punto y final a les Festes de la Terra y a una jornada que había trasladado la música y el entrenamiento a Ses Figueretes desde hacía horas.
MMAlguna vez no se han hecho los fuegos en cualquier pueblo de Ibiza a las 12 de la noche (y de hecho se hace así desde hace décadas en todos los lados, incluso países como Alemania). Pero viene el lumbreras y va a cambiar hábitos para que 4 gatos tienen que coger un taxi. Bravo por la idea. Pues no vayas a ver los fuegos. O vas con tu coche, aparcas un poco más lejos y vas andando. En playa den Bossa sobraba parking.