La Asociación de Bares, Restaurantes y Ocio nocturno de Formentera (ABRO) se constituyó oficialmente a finales del mes pasado. Bajo el amparo de la Pequeña y Mediana Empresa de Formentera (Pimef), su objetivo principal es el de servir de puente entre empresarios del sector y el Consell insular. Franco Chimirri, presidente de esta nueva asociación, explica los primeros pasos a seguir.
«La asociación nace porque, aunque en la Pimef siempre ha habido restaurantes y ocio, no teníamos una asociación constituida entre nosotros como la hay en el resto de España y creemos que en Formentera también es necesaria», comenta Chimirri. El presidente de ABRO es un joven emprendedor del sector de la restauración y ocio nocturno en es Pujols que cree que la nueva organización puede unir a los empresarios para «escuchar más opiniones y ser más fuertes».
El principal objetivo de ABRO es, según Chimirri, «servir de nexo entre la empresa privada del sector de la hostelería y el Consell». De esta forma, el contacto entre empresarios y autoridades «se facilita», especialmente al evitar que sea cada una de las empresas las que se pongan en contacto con el Consell. Durante la reunión del pasado viernes, la nueva asociación tuvo la oportunidad de hablar con varios miembros del Consell: «Fue una toma de contacto en la que hablamos un poco sobre normativas».
Sin embargo, Chimirri sí puede mencionar varios puntos en los que se centraron su reunión: «Comentamos los excesos de coste en el transporte a la isla, que al final a nosotros nos repercute en el margen de negocios y en los precios, y del ocio nocturno, prácticamente inexistente en Formentera». Asimismo, desde ABRO creen que la isla tiene demasiados restaurantes: «Una cosa es que haya y otra que te encuentres con uno cada tres pasos». Por eso, piden que se controlen las licencias y también que los bares y cafeterías no hagan servicio de restaurante.
Empresas residentes
El presidente de ABRO defiende su compromiso con las pequeñas y medianas empresas frente a las grandes corporaciones: «Esto es para la gente de toda la vida de la isla, la que tiene negocios de siempre y que quieren diferenciarse de los fondos de inversión que llegan o que quieren llegar a Formentera». En este aspecto, la asociación sigue muy ligada a la Pimef, de la que son asociados. Es por ello por lo que ya cuentan con restaurantes y empresarios en ABRO, si bien de constituyó hace tan solo unos días.
Chimirri defiende que se continúe apostando por una Formentera «más allá del sol y playa». Para eso, explica, están eventos como Sa Ruta des Pintxos, las jornadas gastronómicas o Madrid Fusión que hay que transmitirles a los turistas que lleguen a la isla y descubran gastronomía y música en vivo, entre otras actividades. «Nos han llegado ya algunas iniciativas que reevaluaremos antes de presentar al Consell. No queremos dar pasos de gigante», apuntan desde la asociación.
«Hay muchas cosas que hacer en Formentera», indica el presidente de ABRO, pero para ello «hay que solucionar problemas» como el coste de la vivienda o la falta de trabajadores. La nueva asociación promete trabajar conjuntamente con empresarios y el Consell para paliar las dificultades a las que se enfrenta el sector hostelero en la isla.