Las empresas de transporte público Autobuses San Antonio, Autobuses Voramar-El Gaucho y Herederos de F. Vilás han adquirido tres nuevos autocares adaptados para las personas con minusvalías físicas. Los nuevos vehículos "cuyo precio supera los 20 millones de pesetas por unidad" cuentan con unas rampas mecánicas, que aúpan hasta el interior del aparato a los pasajeros que necesitan de una silla de ruedas para desplazarse.
Los autobuses se incorporarán a las líneas regulares que atraviesan la isla en cuestión de días, puesto que falta una puesta a punto de las plataformas mecánicas. Cada aparato tiene capacidad para albergar dos sillas de ruedas. Según el responsable de una de las empresas de autocares, el sistema mecánico ha sido importado de los Estados Unidos y es el «último modelo que ha salido al mercado».
Los empresarios quieren que los autobuses tengan un recorrido fijo y unos horarios establecidos, para que las personas que los necesiten sepan a qué hora pasará por las paradas. Los aparatos, marca Iveco, cuentan con los últimos adelantos técnicos, aire acondicionado y dispositivos de seguridad para el transporte escolar, entre otros.