Los ex alcaldes de Sant Joan, Vicent Roig y Vicent Guasch, negaron ayer en el Juzgado número seis de Eivissa que su gestión en el Ayuntamiento tuviera alguna relación con un supuesto delito ecológico causado por la depuradora de sa Cala de Sant Vicent. La denuncia que ha abierto el caso la presentó la propietaria de un terreno contiguo a la central, que asegura estar sufriendo vertidos de aguas fecales de la depuradora.
Ibasan gestiona la planta tras el traspaso municipal. Precisamente esta transferencia es el argumento que esgrimen los dos ex regidores para demostrar que los posibles problemas generados por la central no tienen nada que ver con su gestión.
Vicent Guasch aseguró ayer, tras prestar declaración, que la obra estaba hecha y traspasada al Ibasan antes de ser alcalde y que la contrata especifica que la empresa se compromete a realizar todas las reparaciones. El haber citado a los dos ex alcaldes responde a «una mala interpretación», según Guasch.
El ex gerente del Ibasan, Gabriel de Juan, estaba citado pero no acudió a la convocatoria, aunque declará dentro de un mes. Los otros dos ex alcaldes de Sant Joan, Jaume Marí y Vicent Tur, también deberán declarar.