El colegio público de Cas Serres abrió ayer sus puertas para mostrar a todo el barrio su biblioteca, un espacio hasta ahora reservado a los alumnos del centro y que, gracias a la inversión del Consell Insular, pasa a estar a disposición de vecinos y público en general.
La consellera de Cultura del Consell Insular, Fanny Tur, junto al delegado de Educació y la concejala de Cultura de Eivissa, inauguró ayer la que constituye la primera biblioteca de la futura red insular. La idea, como recordó Tur, es aprovechar las instalaciones de las escuelas para permitir a cada pueblo o, incluso, a los barrios, contar con un punto de lectura al que puedan acercarse niños, jóvenes y mayores sin tener que desplazarse hasta Can Ventosa. «Es un servicio social, no sólo cultural», manifestó Tur, que comentó que si bien estos centros «nunca tendrán el servicio de una gran biblioteca, sí servirán para que una persona se pueda acercar a leer el periódico, coger un cuento infantil o hacer un trabajo». En este caso, además, se puede acceder a Internet.
Por su parte, la directora de Cas Serres, Rosa Velasco, agradeció la labor de la presidenta de la Asociación de Padres de Alumnos (APA), Ana Ortiz, y del bibliotecario, Toni Marí, por su dedicación al proyecto y explicó que durante el mes de julio la biblioteca podrá visitarse de diez a doce de la mañana. A partir de septiembre el horario para los no alumnos del colegio será de cinco a siete y media de la tarde y los sábados de diez a doce.