El consumo de agua es, a día de hoy, idéntico o ligeramente superior a la producción de las plantas desaladoras de es Ca Marí y de Gesa. Los cerca de 2.500 m3 que producen a diario se están empezando a mostrar insuficientes para atender a la demanda que, día a día, crece. En este sentido el propio alcalde de la isla, Isidor Torres, y la responsable municipal de infraestructuras, Pilar Serra, no ocultaron ayer su preocupación por lo que pueda suceder a partir de la próxima semana, cuando empiece el mes de agosto, en el que se espera una mayor afluencia turística a la isla.
Según los datos que maneja el Ayuntamiento a día de ayer el único depósito regulador que está lleno es el de Sant Francesc que, con un nivel de 3'15 metros, equivale a 2.000 metros cúbicos almacenados. En Sant Ferran las reservas se sitúan alrededor del 75 por ciento ya que almacena 2.200 m3 de agua sobre los 3.000 posibles. En la planta de Gesa sólo hay 450m3 sobre los 1.100 posibles. El mayor problema se concentra en Es Pujols, el núcleo turístico por excelencia de la isla, que con una capacidad de 22.000 metros cúbicos apenas almacena un 15 por ciento de su capacidad total sin llegar a los 3.300 metros cúbicos de reserva.
El alcalde de Formentera, Isidor Torres, así como los concejales de economía e infraestructuras, Felip Portas y Pilar Serra, como miembros del consorcio de aguas de Formentera se reunieron ayer en las instalaciones de la depuradoras de Eivissa para tratar el tema del agua. Tras estudiar la situación actual se contemplará la posibilidad de tomar nuevas medidas restrictivas de abastecimiento de agua si el problema persiste.