El pleno del Ayuntamiento de Sant Antoni aceptó ayer por mayoría que todo el municipio sea considerado «zona de gran afluencia turística», incluso los polígonos industriales. En la práctica, esta medida supone que toda la localidad está excluida de cumplir los horarios comerciales, por lo que cualquier establecimiento podrá abrir todos los días durante 18 horas desde el 15 de marzo hasta el 31 de octubre.
El grupo popular contó para la aprobación con el apoyo de los dos concejales de Democràcia Pitiusa (DP). Los ediles del Pacte votaron en contra porque consideran que sólo debería afectar a la franja hotelera de la costa, desde Cala Gració hasta es Pouet. A juicio de su portavoz, Joan Marí Serra, el Govern no consentirá que los polígonos sean catalogados como zonas de gran afluencia turística.
Desde 1994 todo el municipio, excepto los polígonos industriales, se beneficiaba de esos horarios durante la temporada. Con la revisión, hecha -según se aseguró desde el grupo popular- a instancias del Govern, los grandes beneficiados podrían ser los dos hipermercados (uno de ellos de bricolaje) ubicados en el polígono de Montecristo. Hace siete años, el Consistorio decidió no incluir a uno de esos dos hiper (el otro no existía) en el mismo saco del resto de comercios, con el fin de no perjudicar a los pequeños y medianos empresarios. Según el concejal de Gobernación, José Juan Ferrer, en la actualidad esta medida ya no perjudica a los comerciantes. El alcalde alega que debido a la situación del hipermercado, la medida afectará, en todo caso, a los empresarios de Eivissa, no a los de Sant Antoni. La exclusión de horarios comerciales está contemplada en la ley balear de ordenación de la actividad comercial.