María Marí es desde el pasado fin de semana la nueva delegada para las Pitiüses de la organización Manos Unidas. Natural de Sant Joan, María toma el relevo a Asunción Ferrer, responsable de la entidad durante los últimos cuatro años. Maestra de profesión hasta el pasado curso, la nueva portavoz de Manos Unidas en Eivissa y Formentera ha colaborado con la organización que ahora dirige desde hace varios años. «Recuerdo que yo empecé a colaborar con Manos Unidas cuando era delegada Margarita Planells y organicé junto a ella un dinar de germanor para recaudar fondos en colaboración con los alumnos del último curso del centro y de otras muchas personas de Sant Llorenç, Sant Joan y Sant Vicent», recuerda.
Su llegada a la dirección de la organización ha sido a petición de su antecesora. «Asunción Ferrer quería dejar el cargo por motivos personales justificados y al saber que me había jubilado me comentó que podría ayudarles. Como ya conocía Manos Unidas y su funcionamiento y dispongo de bastante tiempo acepté colaborar como voluntaria, algo que desempeño desde hace tres meses. Después me pidieron que aceptara el cargo de delegada y no he sabido decir que no», comenta esta mujer inquieta e hiperactiva que estos días comienza a desempeñar su nuevo cargo.
Al preguntarle por los nuevos proyectos de Manos Unidas para 2002 María ha sido cauta: «De momento no pienso introducir ningún cambio. Considero que debo escuchar y dejarme orientar por las personas que llevan más tiempo que yo dentro de la organización. Así que con su ayuda continuaré la labor que se ha venido haciendo hasta ahora».
Este trabajo del que habla la delegada de Manos Unidas es fruto de un equipo de numerosas personas tanto en Eivissa como en las comarcales distribuidas por diferentes parroquias de las Pitiüses. «Ellos son los que informan sobre los problemas del Tercer Mundo, dan a conocer los proyectos en los que colabora la delegación pitiusa y los que recaudan los fondos para sufragarlos con la organización de distintas actividades a lo largo de todo el año», explica.