El Ayuntamiento de Santa Eulària proyecta ampliar el camino del Pont de sa Llosa, que conecta Santa Eulària, pasando por la escuela de Sant Ciriac, con la carretera de Sant Joan, ya que es una vía cada vez más utilizada por la gente que se traslada al municipio procedente de la parte norte de la isla. Este camino tiene una longitud de 4'5 kilómetros de distancia, con una ramificación de casi un kilómetro que va desde el puente hasta la carretera de Sant Joan a la altura de la subestación de Gesa.
El Ayuntamiento ha redactado un anteproyecto de la obra con un coste mínimo de 540.000 euros (90 millones de pesetas), que seguramente, según el concejal de Urbanismo, Vicent Riera, se incluirá en el próximo presupuesto de la institución, aunque también se maneje la posibilidad de acometerla a través del Plan de Obras y Servicios (PIOS), que subvenciona el Consell Insular. «Este proyecto irá casi seguro en los presupuestos del año que viene. Nuestra intención, además, es adjudicarlo en el primer trimestre del año», dice el concejal de Urbanismo. Con el tiempo este camino vecinal (asfaltado, eso sí) se ha convertido en una carretera, pero con tan sólo seis metros de ancho y sin cuneta, y un trazado sinuoso, con curvas peligrosas para el tráfico.
Por ello, el Ayuntamiento de Santa Eulària planea ampliar la carretera en un metro (hasta llegar a siete), y dotarla con una cuneta que, además, esté preparada para recoger todo el agua que acaba en la carretera. Cabe tener en cuenta que esta vía atraviesa las inmediaciones de un torrente. Asimismo, el anteproyecto realizado por los servicios técnicos del Ayuntamiento prevé la señalización del vial horizontal (una línea que divida los dos carriles) y vertical, así como la reforma del pavimento.