Al Pacte Progressista de Sant Josep no le ha sentado nada bien que la concejal ecologista del grupo, María Tur, denunciara por su cuenta en la sede de Els Verds la actividad industrial que realizan tres empresas de Can Bellotera ubicadas en suelo calificado como rústico común. «Espero que dé una explicación. No ha sido correcta su forma de actuar», explicó a este periódico el portavoz del Pacte, Josep Marí Ribas, Agustinet.
«Me extraña mucho que María Tur haya actuado así. Es la primera vez que alguien se sale de la norma del grupo. Nadie nunca ha hecho hasta ahora una rueda de prensa partidista. Las cosas se han planteado siempre dentro del Pacte», subrayó.
El concejal y conseller insular de Turismo y Urbanismo niega además que la coalición progresista no tenga interés en seguir el tema denunciado por los vecinos afectados, tal y como justificó la coordinadora de Els Verds, Marta Roldán.
María Tur, según Roldán, informó de los hechos a sus compañeros del Pacte, pero éstos «no tenían interés en llevarlo adelante». «Eso no es verdad. No es cierto que no hayamos querido respaldarlo», corrige, por su parte, Agustinet. «No recordamos que en ninguna reunión del grupo María Tur lo haya planteado y en la última, celebrada el miércoles, a la que no asistió porque estaba enferma, sí se trató este problema», señaló el portavoz del Pacte.
Roto el pacto entre Els Verds y las fuerzas progresistas de la isla en el Consell y los ayuntamientos de Santa Eulària y Eivissa, los ecologistas sólo siguen en el Pacte de Sant Josep, aunque ya anunciaron en el última asamblea general que en las próximas elecciones ya no acudirán a las urnas como socios de esta coalición.