L.F.A./R.C.
No hay una proporción entre el número de turistas que se han perdido (10.708 turistas menos en 2003 que en 2002) y el número de pernoctaciones (un millón menos) que han dejado de realizase. Esto pone de manifiesto que son fundadas las quejas de los hoteleros sobre el incremento espectacular e incontrolado de oferta ilegal de residencia turística, que reduce las pernoctaciones en los establecimientos turísticos «legales». La estancia media también bajó en el conjunto de las Islas el pasado año, al pasar de 9,2 días a 8,4 días de media.
En cuanto a la evolución de las plazas de alojamiento turístico, el pasado año finalizó con un incremento de 3.640 camas más con respecto a 2002, con un aumento de 25 establecimientos turísticos. La cifra global de estas infraestructuras de alojamiento en las Islas en es 2.577, que suman en un conjunto 418.815 plazas. Mallorca fue la Isla que aglutinó el mayor número en cuanto a crecimiento de la oferta de alojamiento, puesto que finalizó 2002 con 281.316 plazas turísticas y 2003 con 283.436. Menorca y Formentera no tuvieron ningún cambio en este aspecto, mientras que Eivissa pasó de 78.935 a 80.363 plazas de 2002 a 2003.
En lo que respecta a mercados emisores principales, el principal de Balears es el británico (3.403.700 turistas procedentes del Reino Unido), seguido del alemán (2.839.900), el italiano (368.000, de los que 187.755 vinieron a Eivissa y Formentera), y el francés (242.400). Es destacable que el turismo italiano se ha convertido en el tercer mercado extranjero en importancia en Balears, al haber desbancado al francés y gracias al incremento registrado en Eivissa y Formentera. El mercado español aglutinó un total de 1.590.200 turistas en las islas (1.322.000 en 2002).