Más de once mil expedientes de otros tantos inmigrantes se acumulan, pendientes de resolución, en la Delegación del Gobierno en Balears, según los datos ofrecidos por el titular de la Delegación, Ramon Socías.
Las cifras que ayer ofreció Socías se refieren al mes de abril, por lo que es de prever que, en estos momentos el número será mayor. Por ejemplo, en junio del pasado año había 33.000 solicitudes.
A los 11.000 expedientes aún sin resolver y que el anterior Gobierno dejó sobre la mesa -y que en su mayoría se refieren a solicitud de permisos de trabajo, cambios de domicilio y papeles en general-, hay que añadir cerca de 5.000 personas pendientes de recoger su tarjeta de residencia.
Para hacer frente a esta situación, el delegado del Gobierno anunció que ha preparado un «plan de choque» para agilizar la regulación de inmigrantes que contempla la colaboración de los ayuntamientos para facilitar el acceso a los documentos a los extranjeros sin tener que desplazarse hasta la oficina de Palma.
Socías añadió que esta medida se planteará también a los consells insulares y el Govern con el propósito de que cooperen junto a los consistorios en la descentralización de los trámites de extranjería.
La recepción de documentación en ayuntamientos y dependencias de las administraciones insulares y regional podría descongestionar una oficina de extranjería que, según reconoció el delegado del Gobierno, tiene «un problema de espacio».
El «plan de choque» incluirá también medidas como mejorar la información que se facilita a los inmigrantes y potenciar la función de asesores culturales que actúen como mediadores.
Informe del CES
Según el último informe del Consejo Económico y Social sobre la
inmigración y el mercado de trabajo en España, aprobado el pasado
28 de abril, el porcentaje de extranjeros comunitarios y no
comunitarios sobre el total de la población empadronada en Balears
alcanzaba en Balears el 13,4 por ciento. Eso la sitúa en el primer
lugar del ranking, seguida de Madrid con el 10,3 por ciento.