J. L. M.
La tercera y última fase del proyecto de reforma del Port de Sant Miquel, que persigue la urbanización y mejora de los accesos a ese lugar, ha concluido ya, según explicó ayer el alcalde de Sant Joan, Antoni Marí Carraca, quien recordó que la i ntervención que se ha ejecutado en la zona ha afectado a las aceras, el ajardinamiento, el alumnbrado y la zona de estacionamiento.
«Ha quedado muy bien y en este momento está a expensas de que las compañías Telefónica y Gesa supriman los cables», señaló el alcalde. Carraca recordó que las obras también han permitido la prolongación de la red de saneamiento y la habilitación de la infraestructura necesaria para el soterramiento de los cables aéreos que aún existen en la zona, cuyas conducciones se hallan a la espera de que Gesa y Telefónica las utilicen.
Las obras se iniciaron hace más de seis años y han tenido un coste de 248.500 euros financiados con fondos del Plan Insular de Obras y Servicios (PIOS) del Consell Insular. La última fase ha permitido, entre otras cosas, ampliar el área de estacionamiento del Port de Sant Miquel y habilitar una parada de autobús.
Por otra parte, según señaló el alcalde en su día, el Ayuntamiento ha acordado con los vecinosla remodelación de la parcela triangular que existe en la zona como espacio para usos diversos, como podría ser un mercado artesanal.