Con una belleza natural, sin maquillaje y un habla reposada y dulce, la actriz española Silke Hornillos Klein, madrileña de nacimiento pero residente en Eivissa desde hace 11 años, presentó ayer en la galería Property and Art de Santa Eulària su segunda exposición Entre Chicas y Elefantes, que mantiene la línea de la primera. En ella, se recogen 16 pinturas al óleo en las que predominan los colores vivos que dibujan mujeres de grandes ojos que parecen comunicarse con el espectador y que están inmersas en situaciones cotidianas, como secándose el pelo o fumando, entre otras. Asimismo, la artista plasma sobre el lienzo figurativas representaciones de elefantes en tonos cálidos, obras que podrán visitarse en la citada galería durante un mes.
-¿Qué mensaje quieres transmitir con tus pinturas?
-Hay una transmisión y una búsqueda. Son cuadros desde que empecé a pintar hasta ahora, así que dentro de que ha habido una búsqueda ha habido una lección que viene también de mi personalidad y mi forma de ser. Creo que hay bastante sensualidad en las formas de los cuadros, inocencia, seducción y naïf. Muestra mucho a la mujer, porque me parece muy poderosa y bella.
-¿Y qué papel juegan en ellas los elefantes?
-Me parecen también poderosos. Es de las cosas que más me gustan de la naturaleza. Ahora estoy haciendo como una especie de realismo bastante figurativo.
-¿Por qué utilizas el óleo como técnica?
-Hay algunas que tienen un poco de acrílico, pero me gusta el óleo porque su dificultad te ayuda a hacer cosas que no te permite el acrílico, como difuminar o corregir. Por eso son obras que puedes pasar toda una vida para hacerlas, buscando más volumen, retoques...
-¿Cuesta que te valoren como pintora cuando todo el mundo te conoce por tu faceta de actriz?
-Cuando la gente está acostumbrada a verte de una cosa, sí les cuesta, te exigen más. Es como cuando tus amigos ven que haces algo nuevo y, como te conocen, no lo valoran tanto. Pero bueno, reconozco que estoy empezando y tampoco pretendo que se me valore como pintores que llevan toda la vida dedicándose a esto.
-Eres madrileña, ¿Por qué escogiste Eivissa para presentar tu exposición?
-Porque llevo 11 años aquí y ya antes, cuando tenía 15 o 17 años, venía para hacer la temporada desde junio hasta septiembre.
-¿Por qué te gusta tanto la isla?
-Porque lo tiene todo para mí: naturaleza, está cerca de mi familia, que vive en Madrid, y me siento muy libre. Es una isla que siempre ha sido más abierta que el resto de España, aunque esto quizás ahora no se note tanto.
-¿Cómo surgió esta afición por la pintura?
-Desde pequeña siempre me ha gustado, pero he de reconocer que me queda mucho por aprender... sólo llevo entre dos y tres añitos pintando.
-¿Encuentras alguna conexión entre pintura y cine?¿Te sirves de una para la otra?
-Creo que a muchos artistas nos pasa. Somos artistas porque nos gusta expresarnos a través del arte, son distintas formas. Yo no canto, porque no se cantar, pero sino lo haría.
-¿Y tienes otro tipo de aficiones para las que tengas dotes?
-Sí, esta es una forma más de expresarme a través del arte, pero también he hecho ropa, cinturones, collares. Son hobbies que tengo desde pequeña.
-¿Cuáles son tus próximos proyectos?
-Ahora tengo un proyecto personal y no trabajaré en cine hasta mitad del año que viene, pero tengo dos películas por estrenar en septiembre: una mexicana que se llama 'Al otro lado', de Gustavo Loza, y 'La hora fría', de Elio Quiroga.
-¿Te has inspirado en los papeles que has realizado en tus películas para pintar estas mujeres que están como sumergidas en diversas escenas?
-La verdad es que no, porque en las películas en cierto modo son otros los que deciden el personaje que vas a ser y que tienes que interpretar. Aquí decides tú lo que quieres contar. Me gusta buscar los personajes dentro de mí.
Irene Luján