El Ayuntamiento de Eivissa encargará un estudio para analizar y cuantificar desde una base real el sobrecoste que representa para la ciudad la prestación de servicios a una población superior a la censada que, procedente de otros municipios, consume a diario recursos y territorio en Vila. Es uno de los acuerdos alcanzados por una comisión de ex alcaldes de la ciudad convocada ayer por primera vez por la alcaldesa Lurdes Costa. El objetivo fundamental de dicha reunión era analizar el procedimiento para reclamar al Govern la capitalidad de Eivissa como forma de compensación por la sobrecarga que sufren sus servicios. La comisión, que reunió a cuatro ex alcaldes y a la actual primer edil, halló una fórmula para lograr su objetivo al amparo de la Ley de Régimen Local de 2006, que establece en su articulado la posibilidad de que las ciudades que son sede de lo consells insulars puedan acogerse a un régimen especial. La misma ley también recoge ese derecho para los municipios que prestan servicios supramunicipales, como es el caso de Vila.
A tenor de lo recogido por la ley, la capitalidad de Vila parece estar garantizada, sin embargo, la comisión de ex alcaldes parece ser que quiere atar bien la compensación que recibirá la ciudad, analizando con rigor la carga real que representa para Vila afrontar esos servicios supramunicipales.
«No estamos inventando nada; ya existe una carta municipal en Barcelona y una ley en Madrid», explicó Enrique Fajarnés, quien precisó: «No pretendemos reducir los posibles recursos de otros municipios de la isla ni vamos en contra de nadie; buscamos una compensación para nuestro pequeño territorio».
Xico Tarrés, por otra parte, aludió a la «situación de desventaja muy grande» que sufre la ciudad y recordó que los tributos de su población residente sirven para pagar servicios de los que también se beneficia un buen número de vecinos de otros municipios.
La actual alcaldesa, Lurdes Costa, precisó que la capitalidad persigue no sólo un «reconocimiento honorífico» que representará sino por «servicios y el reconocimiento a servicios y problemática que la ciudad presta o sufre para dar respuesta a las necesidades de todos los ciudadanos». Costa remarcó que este sobreesfuerzo de Vila «tiene repercusiones económicas claras que queremos cuantificar».
La alcaldesa, que se reunirá el lunes con la portavoz de la oposición, Virtudes Marí, para informarle del contenido de la comisión de ex alcaldes, explicó que el plenario municipal aprobará próximamente una propuesta para elevar la petición de la capitalidad para la ciudad de Eivissa al Govern. No obstante, matizó que los pasos que los servicios jurídicos de Vila realicen para preparar la propuesta serán planteados ante la comisión de ex alcaldes para mantener el consenso que se persigue con esta iniciativa, que fue uno de los compromisos adquiridos por la alcaldesa en su discurso de investidura. Lurdes Costa destacó la «composición política» y la «experiencia» de cada uno de los ex alcaldes al frente del Ayuntamiento como elementos que pueden hacer «muy rica» la labor de este 'comité de sabios'. La alcaldesa expresó su deseo de recurrir a este comité para otros asuntos relacionados con la ciudad.
Además de Costa, Tarrés y Fajarnés, forman parte de la comisión Enrique Mayans y Joan Prats.