La ONG Via Oberta nació hace cuatro años a partir de un viaje que unos amigos hicieron a Nepal. Una vez allí pasaron por un pequeño pueblo llamado Loruc, una región muy pobre que se encuentra cerca de la ciudad de Pokara. «A partir de ese primer viaje decidimos organizarnos un poco más y nos registramos en Balears como la ONG Via Oberta», cuenta Joan Roig, miembro de esta organización. Los ibicencos Joan, Clara Bonet, Arantxa Guasch y Ana Belén Gómez viajan este año con Raquel, de Valencia, y Pere, de Barcelona, a esa misma región, Louruc, pero trabajarán en otro colegio. «Nuestra actividad allí se centra en centros educativos, a nivel educativo y a nivel sanitario porque allí la sanidad no es pública; una vez visité un hospital concertado y la única puerta física que había era una cortina empapada de sangre entre la puerta de quirófano y el resto, que no tenía nada: ni suero, ni sábanas; la palabra nada define todo lo que había», cuenta Joan. En este sentido, Clara cuenta que contrataron un médico e hicieron un completo botiquín. En el plano educativo, Via Oberta proporciona libros a los profesores para que puedan dar clases: «Este año trabajaremos con un colegio muy pobre de Louruc, que se encuentra debajo del Himalaya; las aulas son cuatro paredes, sin ventanas, y los niños están sentados en el suelo», afirma Clara. Y añade: «El profesor puede enseñar todo lo que pueda, pero sinceramente es muy complicado si no tienen nada de material». Arantxa y Ana Belén forman parte por primera vez de esta expedición solidaria: «La verdad es que no me puedo hacer una idea porque luego seguro que será completamente diferente», asegura Ana Belén. Los voluntarios pagan el trayecto y la estancia en Nepal. Una vez en el país se encargan de gestionar los recursos que han conseguido en Eivissa. «Hemos elegido esta forma de actuar porque muchas veces la gente no se fía de las organizaciones porque no saben dónde va a parar el dinero; nosotros podemos presentar facturas, vídeos e imágenes de nuestro trabajo en el lugar», cuenta Joan. Los miembros de esta asociación también fomentan diferentes actividades lúdicas ya que, por ejemplo, el año pasado se hizo yoga y este año quieren hacer danza oriental y gimnasia rítmica: «Con esto pretendemos fomentar el acercamiento entre géneros y para que conozcan la existencia de otras culturas», cuenta Clara. Ana Belén y Arantxa son las primeras que parten junto a Raquel a Nepal, mientras que Joan, Clara y Pere viajarán el próximo 8 de enero.
María José Real