La Conselleria d'Obres Públiques ya ha recibido la notificación judicial mediante la cual se levanta la paralización cautelar de la planta asfáltica de sa Coma. Esta decisión de los tribunales ha sido posible después de que los vecinos de la zona decidieran retirar la demanda que interpusieron contra esta instalación. Los vecinos consiguieron a cambio el compromiso de que la planta sólo se usará durante unos meses más y después se restaurará todo el entorno. Fuentes de la Conselleria explicaron que la planta se pondrá a funcionar ya, porque en los últimos días se ha preparado todo el material necesario.
De hecho, durante la jornada de ayer ya se realizaron labores de asfaltado en la zona más cercana a Sant Antoni, aunque desde la Conselleria no supieron precisar si el material provenía de esta planta.
Desde el Govern no ven «inconveniente» en la puesta en marcha de esta planta y ya han anunciado que implantarán un servicio de vigilancia medioambiental que estará activo hasta que la actividad finalice.
Las empresas concesionarias comenzarán ahora a asfaltar los tramos no afectados por los modificados de las autovías del aeropuerto y de Sant Antoni.
Ante esta noticia, desde el Consell exigieron ayer al PP que rectifique sus críticas al conseller Albert Prats, en las que le acusaban de permitir el funcionamiento de la planta pese a estar paralizada. «En ningún momento el conseller dijo que la planta estuviera ya funcionando. Al contrario, Albert Prats pidió desde el primer momento que no se pusiese en marcha sin acuerdo de los vecinos, sin garantías de restauración de la zona y sin que se levantase la paralización».
Desde el Consell insistieron en que se han seguido todos los pasos legales para poner en funcionamiento esta planta. «Lo que tiene que hacer el PP es tomar nota de cómo se tienen que hacer las cosas para evitar paralizaciones judiciales, destrucción del territorio y manifestaciones de vecinos afectados; el PP está desautorizado para dar lecciones sobre la construcción de las autovías», explican desde el Consell, donde creen que los populares han demostrado que «todavía no han aprendido nada». Desde la máxima institución insular aseguran que no «huirán» de su obligación de velar por la correcta finalización de las autovías, pese a que las consideren «totalmente desmesuradas». También defienden al Govern por «seguir criterios de máxima reducción del impacto, de costes y de afectación sobre los vecinos y el territorio».