El Ayuntamiento de Sant Josep aprobó ayer el inicio de la expropiación forzosa de 111 m2 a la empresa constructora Medi para poder hacer una rotonda en el cruce de la carretera de Sant Josep a Cala Tarida con la vía de Cala Molí. Esta obra está incluida en la mejora de la carretera que va de Cala Tarida a Cala Molí, que consiste en un refuerzo del pavimento y en la dotación de un carril bici.
La expropiación está valorada en 8.000 euros y se trata de terrenos sin derechos edificatorios. Según relató el regidor de Obras del Ayuntamiento, Pere Ribas, han mantenido conversaciones durante más de un año con la empresa constructora, pero desde ésta les exigían una compensación económica. «Hicimos una oferta, pero no nos han contestado», añadió Ribas, que indicó que no les ha quedado más remedio que recurrir a la expropiación porque la obra ya está en marcha. De todas formas, todavía confía en que la empresa acabe aceptando la cifra y no se tenga que terminar el proceso expropiatorio. De hecho, tienen previsto que las obras acaben antes de la temporada turística. Si no se consiguen los terrenos para entonces, se pintará una rotonda y luego más tarde, cuando el Consistorio sea dueño del suelo, se construirá.
La concejala del PP Encarna Castro anunció su voto de abstención porque están de acuerdo en el fondo pero no en las formas. De hecho, calificó la actuación del Ayuntamiento de «chapuza sobre la marcha» y de acto a «salto de mata». Castro recordó que Sant Josep sabía desde hace tiempo que necesitaba ocupar esos terrenos y no lo ha hecho, lo que ahora retrasará toda la obra.
El alcalde, Josep Marí Ribas, replicó que «los amigos de Medi son ustedes», en alusión a que esta empresa aparece en el sumario judicial del caso Huerta. «Con estos antecedentes supongo que no nos quieren facilitar el trabajo», añadió el primer edil. El Grupo Medi tiene numerosos frentes abiertos con el Consistorio, como un recurso contencioso, además de que Sant Josep se ha visto obligado a cortarles la luz. La segunda fase de la carretera, que irá de Cala Molí a Cala Vedella, está pendiente del visto bueno de Medi Ambient porque linda con una área protegida.
Encendido debate sobre la nueva ley del aborto
El grupo popular presentó una moción para que el Ayuntamiento inste al Gobierno a derogar la ley del aborto, ya que según la concejala popular Encarna Castro se propugna el «aborto libre» y se «vulnera la Constitución». «Un 56% de los votantes del PSOE no están de acuerdo», criticó Castro.
La concejala de Bienestar Social, Pilar Ferrero, defendió que la ley da más libertad a las mujeres y evitará que ningún profesional de la medicina ni ninguna mujer acabe en los tribunales por una interrupción del embarazo. Castro defendió que la anterior ley era mejor y comparó el aborto con un «asesinato».
Por otro lado, el PP preguntó por qué no se ha ejecutado ninguna Vivienda de Protección Oficial (VPO) en el municipio. El concejal de Urbanismo, Josep Antoni Prats, reconoció que por el momento no ha sido posible, aunque explicó que el Ibavi ha hecho numerosas ofertas a promotores con obras en el municipio. «Hay conversaciones avanzadas pero no hay nada cerrado porque no hay voluntad por parte de los promotores pese a que las ofertas eran buenas». Otra posibilidad es que Sant Josep cediera terrenos para que el Ibavi las construyera, pero no hay suelo público porque el PP no obligó a los promotores a hacer cesiones en su día, algo que representa un «gran problema».
En el pleno la concejala de Turismo, Mª Àngeles Mostazo, anunció que harán un plan de limpieza específico de cada playa dependiendo de su catalogación.