El Ayuntamiento de Eivissa comenzó ayer la tramitación para que se reconozca su condición de capital. Una declaración que «no es una cuestión de título ni de nombre», según aseguró la alcaldesa, Lurdes Costa, sino que persigue una compensación económica por el «esfuerzo real» que supone prestar servicios «a todos los ciudadanos de Eivissa».
Como primer paso en la tramitación, Vila aprobó ayer por unanimidad instar al Consell d'Eivissa a que eleve una iniciativa legislativa al Parlament balear para que haga efectiva la declaración de capitalidad. Esta petición conlleva una propuesta económica de siete millones de euros anuales y un 4% de las inversiones totales de la Comunitat Autònoma, que Vila espera recibir como compensación por el sobrecoste que soporta por prestar servicios supramunicipales. Además, la propuesta va acompañada por una encuesta ciudadana, que indica que el «95% de las personas que residen en la isla entiende que la ciudad es la capital». También conllevará un manifiesto que se distribuirá para conseguir firmas de apoyo de residentes de toda la isla.
En su discurso, la alcaldesa aseguró que «la ciudad de Eivissa es la capital de la isla desde todos los puntos de vista posibles: por razones históricas, por sentimiento ciudadano, por sus condiciones sociodemográficas, urbanísticas y administrativas». «Presta servicio a todos los ciudadanos de Eivissa, que ineludiblemente deben pasar por los juzgados, comisaría, por el hospital, el Consell, o las oficinas del Govern, para citar, nada más, algunos de los servicios que ofrece», destacó Costa, que recordó también que el municipio «es la puerta de entrada de las mercancías a la isla» y «la puerta de salida» hacia Formentera.
La alcaldesa indicó además que la prestación de estos servicios «es un compromiso» por el que ahora el Consistorio «pide ayuda» debido a que «el esfuerzo tributario que hacen nuestros residentes ya es suficiente». Asimismo, explicó que Vila cuenta con «el marco legal necesario para conseguir esta reivindicación» y explicó que la normativa autonómica establece que los municipios que alberguen a consells insularss y presten servicios supramunicipales, podrán recibir aportaciones extraordinarias de la Comunitat Autònoma. «Por tanto, no estamos pidiendo nada que no nos toque», agregó.
Desgaste por población
Tras el pleno, la alcaldesa puso como ejemplo algunos datos incluidos en el estudio que avala la propuesta de capitalidad. En este sentido, explicó que Vila, con 4.000 habitantes por km2, soporta una densidad de población mayor que «cualquier otra ciudad de Balears», como puede ser Palma, con 200 habitantes por km2. También indicó que recibe un población fluctuante de más 15.000 personas diarias y que con esta «presión social», aumenta el «desgaste» de la ciudad.
Al pleno asistieron diputados ibicencos del PP y de PSOE-ExC, como Marián Suárez, Enrique Fajarnés y Carmen Castro. En este sentido, Costa afirmó que, si bien tiene el «apoyo directo de los compañeros de Eivissa», confía en que sepan «convencer» al resto del Parlament para que declare a Vila capital por unanimidad.
Marí: «Es poner negro sobre blanco una realidad diaria»
Por su parte, la portavoz del PP, Virtudes Marí, destacó que el acuerdo entre PP y PSOE-ExC de Vila, para que se reconozca a la ciudad como capital, «es total y absoluto». «Lo que hemos hecho es poner negro sobre blanco una realidad diaria de hace muchísimo tiempo», destacó Marí, que recordó que la ley de capitalidad aprobada en la pasada legislatura «abrió un camino», ya que se introdujo un artículo que ofrece la posibilidad a las capitales de las islas «a tener esta oportunidad». «Estoy convencida de que lo que va bien a Eivissa ciudad va bien a Eivissa isla», destacó la portavoz.
Marí también ofreció un discurso durante el pleno de ayer en el que indicó que Vila «crea, promueve, difunde e invierte en beneficio de toda la isla como pocas ciudades de su tamaño en el mundo», e indicó que «no es, ni pretende ser, un poco más que sus cuatro municipios hermanos». «Pero la tradición y el devenir de los tiempos la han posicionado en la mente de Balears, de España y del mundo como la primera entre iguales», destacó.
Marí aseguró también que el reto de obtener la capitalidad «trasciende las conjeturas políticas y requiere la complicidad del conjunto de la ciudadanía y de toda la corporación ibicenca». Por último, la portavoz remarcó que este reconocimiento «actuará como facilitador para la culminación de proyectos estratégicos y ayudará a promover nuevas iniciativas económicas».