El año pasado fue una muy buena temporada para nosotros, pero este año se ha notado muchísimo la crisis», dice Susana, una de las artesanas que domingo tras domingo expone sus productos en el Mercat Vell.
Para ella, es muy importante que los clientes diferencien entre los artesanos y los reventa: «Los que tenemos el cartel del Ajuntament de Sant Antoni somos los artesanos. Es importante que los turistas sepan que nuestros productos son un poco más elevados de precio, pero son artículos que no van a encontrar en ningún otro lugar».
A pesar de la crisis mencionada, ella dice que «la gente hoy en día busca productos que no vengan de China y, a poder ser, que no se encuentren en otras tiendas, lo que nos beneficia bastante».
Los turistas pasean, miran, dudan y algunos se deciden. Samantha, inglesa, le muestra a su novio los pendientes que ha decidido comprar. Están hechos de cristales de murano. «Me gustan porque a mí, al ser rubia, me queda bien el color azul», dice la chica.
Desde ayer, el Mercat Vell acoge, además, una novedad: una galería itinerante de arte a cargo de la Asociación Cultural Es Juvert, que expone obras de artistas nativos como Kim Brunch, Paco Alba o Pablo Sierra.
Según los encargados de esta galería, «ha tenido muy buena acogida. Los turistas que pasean por aquí paran a mirar interesados. Lo más seguro es que se mantenga a lo largo del año».
Cuadros en relieve, postales, pinturas, figuras de payesas ibicencas o esculturas son algunos de los objetos decorativos que se encuentran dentro de esta galería. Jean Etienne y su mujer Marian, franceses, compraron hace muchos años una casa en Eivissa. «La tenemos toda decorada con motivos ibicencos. Nos encantan. Tenemos cuadros de payesas, espardenyes, pinturas de Dalt Vila...», dice Marian, a lo que su marido añade: «Estábamos mirando uno de estos cuadros, de los más pequeños, para llenar un hueco en el salón. Nos lo pensaremos», dice sonriendo.