Con una enorme expectación mediática, dio comienzo la Copa del Rey de Vela. Ayer por la mañana había tantas fuerzas de seguridad del Estado y tantos escoltas de la Familia Real, que daba la sensación de que iban a llegar todos sus miembros.
Pero no. Tan solo llegó don Felipe, que vestido con el uniforme del CAM, con una bolsa en la mano, fue saludando a quienes les estaban aguardando, miembros de los staff de los patrocinadores de la prueba
Decepción total, ya que com omínimo esperábamos los de los otros años: los Reyes, sus hijos y los hijos de estos, o sea, las infantas Leonor y Sofia. Que menos, ¿no? Solo el Príncipe, que es el único que compite en la presente edición, a la que como no se sumen más personajes, aunque solo sea asomándose por el pantalón, va a ser también la que menos va a brillar en muchos años. Pero no seamos alarmistas y demos tiempo al tiempo. Porque esto no ha hecho más que comenzar.
Al rato se hicieron los barcos a la mar buscando posiciones en el campo de regatas a la espera de que se dijera la orden de salida. De pronto, ese puntito que salía de la base naval de Porto Pi se fue engrandeciendo hasta tomar forma del Fortuna, el yate real, que se acercaba a ver la regata. ¿Con quién? Pues con la Reina doña Sofía, que desde cubierta saludaba.
Por eso hay que esperar que mañana, día de la regata larga, aparezcan por las instalaciones del RCN el Rey, cuya prueba lleva su nombre, y doña Letizia y las dos infantas.
Por lo demás, pocas cosas más que añadir. Bueno, sí: que a los medios de comunicación, para identificarnos, nos han colocado en la muñeca una pulsera de color rosa.parecida a a que se colocan los turistas del todo incluido y que el Projecte Home tiene stand y que, según nos comentó Tomeu Catalá, de parte de RCN de Palma recibirán la caja íntegra del bar de uno de los días que dure la Regata.