La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sant Josep, Encarna Castro, no presentó su candidatura a la alcaldía porque asegura que tanto la dirección insular del PP como la de Sant Josep le dijeron que iban a ampliar el plazo con el fin de negociar una alternativa conjunta y finalmente no lo hicieron. «Me han engañado como a una china», dijo ayer Castro, que aseguró sentirse «dolida, decepcionada y muy afectada» por la actitud de los órganos de dirección.
Según su relato, el pasado jueves, a tan sólo una hora y media de la hora límite para presentar la candidatura, miembros de la dirección la llamaron urgentemente para que se reuniera con ellos en un bar de Sant Josep pidiéndole que no se presentara. «Insistí en que el plazo terminaba, pero me dijeron que no me preocupara porque se podía ampliar y textualmente me aseguraron que si el proceso se tenía que dilatar se haría, además de que me convencieron diciendo que el acuerdo sería muy beneficioso para mí», explicó Castro, que aseguró que «confió» en esas personas. Ese día quedaron en que el viernes la concejala haría unas gestiones y que luego les llamaría para continuar con la conversación. Sin embargo, ni el viernes, ni el sábado ni el lunes contestaron a las innumerables llamadas, sms y correos electrónicos que les envió Castro. «Cuando vi que era lunes por la noche, que no me habían dicho nada, que yo ya no podía presentar mi candidatura y los demás sí la habían presentado y que tenían orden de hacer las elecciones rapidito y cerrar el tema yo dije:'Madre mía, que burra, que pardilla y que ingenua he sido'», explicó.
La concejala no quiere revelar los nombres de las personas que le han «traicionado y humillado», pero lamentó que todas ellas no le dijeran claramente a la cara que no la querían como candidata. Al contrario, asegura que la animaban a hacerlo, le «alisaban la espalda» y luego por detrás apoyaran a Neus Marí, Berris y la humillaran «anónimamente» en la prensa. La guinda fue que la intentaran embaucar para que no presentara la candidatura. «Yo creo que el temor que tenían es que yo ganara», indicó la regidora, que acusó al presidente de la junta local, Enrique Garcerán, de no organizar unas primarias pese a que el 90% de los militantes que asistieron a la última reunión lo solicitaron.
Castro también duda de la imparcialidad del comité electoral, ya que aseguró que uno de sus nueve miembros le ofreció votarla si ella le ofrecía un cargo. «No estoy acostumbrada a trabjar así, yo le dije que le podía ofrecer un puesto si era candidata y él me dijo que le estaban dando cargos al Consell; yo no quería hipotecarme con nadie», indicó Castro, que ha oído que hubo más miembros del comité que lo hicieron. «Allí se repartieron cargos como churros», insistió la concejala, que no quiere acabar «en corruptelas y sentada en un banquillo».
Según la portavoz del PP en Sant Josep, ello ha creado gran «indignación» en el partido y que han sido ya 15 las personas que la han llamado para darse de baja del PP. «Yo les he dicho que estén tranquilos, estoy haciendo de tripas corazón», añadió Castro, que no sabe si se irá del partido y que no lo quiere decidir «en caliente» porque ahora podría «decir cualquier burrada». Lo que sí sabe es que no quiere trabajar con el equipo de Berris, quien también la ha decepcionado. «Se me han quitado las ganas, yo no puedo trabajar con gente que por delante me ponen una cara y por detrás me están acuchillando», añadió, asegurando que la actual dirección ha acabado con 20 años de unidad en el PP de Sant Josep y ha creado dos bandos. Todo este malestar se lo transmitirá hoy a los presidentes balear e insular, José Ramón Bauzá y Miquel Jerez, en la reunión de la junta local.
«Los sondeos son más favorables a mí que a Neus 'Berris'»
La concejala explicó que havisto encuestas que maneja el PP y son más favorables a ella que a Berris. «Dicen que en intención de voto y conocimiento yo tengo un 54% y ella un dos», añadió Castro, que también explicó que en su momento se quiso hacer una lista de integración entre Neus Berris, ella y Manuel Vijande como cabeza de lista. «Yo sacrifiqué mis aspiraciones por la unidad, pero ni esto les pareció bien», añadió.