El presidente de la Federación Hotelera de Ibiza y Formentera, Juan José Riera, considera una «barbaridad» que los videos colgados en Youtube sobre la práctica del 'balconing' tengan más de 300.000 visitas, al entender que del visionado de estas imágenes se desprende la idea de que los jóvenes que saltan de las habitaciones de su hotel a la piscina son «héroes».
Sin embargo, según ha señalado Riera en una entrevista a RAC1, recogida por Europa Press, no hay imágenes de los jóvenes que quedan «estampados en el suelo» de las terrazas, con lesiones graves, ni de aquellos que fallecen, «destrozando vidas y familias enteras». Por ello, el representante de los hoteleros de Ibiza cree que sería bueno que también aparecieran estas imágenes en la red, para desmitificar esta peligrosa práctica.
Sobre estos jóvenes, a los que no duda en llamar «kamikazes y suicidas», Riera cree que no sólo se encuentran en Ibiza, sino que en otros destinos como Chipre, Míkonos o Croacia también existe esta costumbre de intentar alcanzar la piscina desde la habitación del hotel, o simplemente de pasar de una habitación a otra por la fachada. Sin embargo, aclara, «siempre vende más cualquier noticia que se produzca en Ibiza».
Por ello, desde la Federación proponen que se realicen videos como los de la Dirección General de Tráfico (DGT), donde se refleje la realidad: «gente estampada, inválida y muerta». También propone que en las informaciones de bienvenida los touroperadores exhiban con fotografías cómo queda un joven estampado contra el suelo tras saltar de su habitación.
«Lo que no podemos hacer es enjaular a la gente; nosotros tenemos hoteles, no centros penitenciarios», enfatiza, para señalar a continuación que el perfil del joven que salta de un balcón es «hombre» y, en la mayoría de casos, «británico».
Riera insiste en la peligrosidad de esta práctica, que califica de «suicidio» y «ruleta rusa», puesto que el precipitado «nunca sabe si va a caer dentro de la piscina». Por ello, se muestra de acuerdo en que los hoteles deberían expulsar del establecimiento a quienes lo hagan. Riera cree también que el fenómeno se ha hecho muy famoso este verano porque ha aumentado el número de muertos.