El windsurfista Mateo Sanz y la empresa Telefónica-Movistar, en la persona de su responsable de comunicación en Balears, Carlos Prieto, recibieron ayer en el Bar del Centro de Samt Frncesc de Formentera los galardones correspondientes a los premios 'Romaní' y 'Ribot' que otorgan los medios de comunicación de la isla de Formentera, para premiar y castigar a las actuaciones personales, empresariales o institucionales y en especial las actividades relacionadas con los medios de comunicación.
El premio 'Romaní' toma su nombre de una planta de múltiples usos tanto en la cocina como en la medicina tradicional, mientras que el 'Ribot' hace referencia a un hierbajo inútil que crece por todas partes y que presenta unos pinchos que revientan neumáticos de bicicletas y ciclomotores y dejan pies baldados a los caminantes ingenuos que la pisan.
En el caso de Mateo Sanz, que no es el primer reconocimiento que recientemente recibe por sus logros personales, la decisión era bastante obvia y pese a que hace pocos días recibió el premio del Deporte de Formentera, la decisión de la prensa al respecto ya se produjo hace más de un mes una vez conquistar el campeonato mundial de windsurf en la modalidad RS:X en la categoría sub-19 en Estambul a finales de verano.
En cuanto al premio 'malo' el que castiga a una deficiente gestión y servicio y, por encima de todo, la nula información en cuanto se producen problemas derivados de su gestión, Telefónica-Movistar, obtuvo el 'Ribot' por los repetidos fallos de cobertura y servicio que se producen cada verano y por la nula información de los motivos y alcances de las averías, cortes y deficiencias del servicio especialmente en verano.
El premio consiste en una obra de arte de artistas formenterenses y si este año se trataba de dos trabajos de Enric Riera, el año anterior fueron dos pequeñas esculturas de Aarón Keydar.
Inversiones para mejorar la telefonía móvil
Carlos Pietro aseguró ayer que la empresa tiene previsto invertir a corto plazo un total de 40 millones de euros para banda ancha de móviles en Balears, a fin de mejorar el servicio de telefonía en las zonas turísticas de las islas. Prieto señaló que se trata de una inversión general aunque siempre atendiendo y priorizando la demanda de servicio en determinados puntos de máxima afluencia turística y en este sentido reconoció que los problemas que se dan en los últimos años en Formentera son ciertamente lógicos cuando se trata de una isla con una población que no llega a los 10.000 habitantes pero que en verano llega a as 40.000.