La consellera de Benestar Social de Formentera, la socialista Margalida Font, considera que ha llegado el momento para que se produzca el relevo del senador por las Pitiüses, ocupando el lugar que hasta la fecha ha desempeñado Pere Torres 'Casetes', en virtud del pacto programático que se hizo de cara a las elecciones generales de 2008 en la que ella iba de número dos con el compromiso hecho público en reiteradas ocasiones de que el último año de legislatura Formentera tendría su propia voz en el Senado.
«Los pactos están para cumplirlos y no dudo -afirmó Font-, que se cumplirán» y al mismo tiempo señaló dos aspectos importantes para que se lleve a cabo el traspaso de titularidad del senador por las Pitiüses de Pere Casetes a ella y el primero de ellos era que «está muy claro que en su momento se dijo que el relevo se iba a producir antes del último año legislativo útil y ese comienza a mitades de febrero».
No es el mismo caso de Pilar Costa que fue elegida senadora por las Pitiüses al vencer en las generales de 1996 a Josep Juan Cardona hasta entonces senador por Eivissa y Formentera; al ganar las municipales y autonómicas de 1999, por incompatibilidad de su cargo como presidenta del Consell d'Eivissa i Formentera, Costa tuvo que dejar su puesto al número dos de la lista, Isidor Torres a la sazón alcalde de Formentera por la COP aunque en ese caso no existía incompatibilidad.
En segundo lugar Margalida Font incidió en que aunque el acuerdo programático se estableció entre ExC y el PSOE, «Torres y yo pactamos hacer efectivo el cambio al inicio de esta última legislatura que tendrá lugar en febrero», añadiendo que no tenía la menor duda de que todo se realizaría según los acuerdos iniciales: «Estamos aún en la primera quincena de enero por lo que hay tiempo para proceder de la forma adecuada».
Voces dispares para un mismo asunto
Las afirmaciones de Font contradicen de alguna manera a lo publicado ayer por este rotativo pues Pere Casetes señalaba dos aspectos muy dispares. En primer lugar que no había nada firmado, cuando para Font estaba acordado; pero sobre todo por el hecho de que Casetes suponía que el relevo o traspaso se produciría durante el segundo trimestre con lo que la labor de Font en el Senado, entre elecciones, vacaciones de verano y de Navidad previas a la disolución de las Cortes para dar paso a las generales de 2012, le dejaba escasos meses para ejercer su función y jamás tendría nada que ver con el pacto de 'ultimo año legislativo útil' que comenzará el próximo mes de febrero.