El Partido Popular sitúa la lucha contra la corrupción como «uno de los objetivos principales» de la formación, por entender que el funcionamiento del sistema democrático «no debe quedar nunca en entredicho por actitudes permisivas, indolentes o exculpatorias ante la gravedad de determinados comportamientos».
Así se recoge en el programa-marco electoral para las elecciones autonómicas, bajo el título 'Más sociedad, mejor gobierno. Compromiso 2011-2015', que el PP ha hecho público este viernes con motivo de la convención que se celebra en Palma de Mallorca con sus candidatos para dar el pistoletazo de salida a los comicios de mayo.
En ese documento, el PP dice que es preciso someter a «un mayor control y fiscalización los ingresos, el patrimonio, las actividades privadas y las actuaciones públicas de todos los cargos públicos». Por ello, se compromete a publicar «las retribuciones íntegras de los cargos públicos y electos, directivos y personal de confianza de las instituciones y de sus gastos de representación».
Tras afirmar que la respuesta ante los casos de corrupción debe ser «justa y contundente», ve necesario «reformar el Código Penal, ampliando y endureciendo los tipos penales relativos a corrupción, adecuando las sanciones para cargos y empleados públicos para que sean ejemplarizantes, proporcionales y disuasorias». Además, plantea «ampliar los plazos de prescripción de esos delitos».