Durante 24 horas el Paseo de Vara de Rey de Vila se convirtió en ese lugar idílico muchas veces soñado donde no importataba la nacionalidad ni el color de la piel para ser feliz. Y todo gracias a la undécima edición de la Mostra d'Entitats Solidàries organizada por el ayuntamiento de la localidad y que tuvo a la alcaldesa Lurdes Costa como invitada de honor a partir de las doce de la mañana.
No en vano la gran cantidad de público asistente durante todo el día, disfrutó sobre manera viendo compartir espacio a mauritanos con argentinos, amigos del Tibet con paragüayos, murcianos con extremeños, responsables de la ONCE con personas que luchan contra el cáncer o voluntarias de Cáritas con misioneras Trinitarias.
Y es que no faltó de nada, ya que en total fueron 55 las entidades y asociaciones que estuvieron presentes durante la edición de este año. Así a cualquier hora y en cualquier espacio siempre había alguna actividad en marcha, siendo algunos de los que más gustaron el circuito de concienciación de la ONCE, por el que no paraban de entrar y salir participantes, o el stand de la Asociación de Personas con Diabetes de las Pitiusas (Adipitiusas) en el que Inés y Antonia hacían análisis de glucosa en el momento totalmente gratuitos.
Colectivos de ciudadanos
Además, de entre los colectivos de ciudadanos que residen en la Isla eran especialmente llamativos dos: el de la Asociación de Mauritanos de Eivissa y el de la Asociación Cultural Francesa de Ibiza y Formentera.En el primero de los casos fueron muchísimos los visitantes que se fotografiaron con el traje típico del país para hombres y mujeres al módico precio de dos euros destinado a los niños que no han podido ser escolarizados en su territorio, y en el segundo, porque Jaqueline, presentaba dos vestidos tradicionales de la Bretaña francesa, igualitos que Becassine, una heroína de comic de nuestro país vecino que viaja desde el campo hasta la ciudad de París.
Por su parte, entre las organizaciones no gubernamentales, mientras los voluntarios de Cruz Roja Salva e Inés mostraban el ingente trabajo que realiza la delegación pitiusa, Caritas se llevaba sin duda la plana gracias al trabajo incansable de sus veterenas colaboradoras, que vendían algunos de sus productos más originales de la muestra, unas bolsitas cuya forma por fuera era igual que unas muñecas pagesas y que servía para guardar multitud de cosas en su estómago.
En este sentido, un denominador común durante todo el día fue la venta de productos para ayudar a recaudar fondos para las distintas organizaciones.
Así por ejemplo, la Asociación de Esclerosis múltiple de Ibiza y Formentera (Aemif) y Manos Unidas, vendían camisetas a precios que oscilaban entre los 5 y los 7 euros la Asociación Ibiza Diócesis Misionera fundas de móviles colgantes, boligrafos, pulseras o estuches; o el Comité de Recolzament al Tibet multitud de productos relacionados con este país y con su líder espiritual, el Dalai Lama.
Actividades para niños
Además, durante toda la jornada el Paseo de Vara de rey acogió una serie de actividades musicales, de danza y de baile para todos los públicos, como el llevado a cabo por la Colla de ball pagès Sa Bodega, los cuentacuentos a cargo de Los Duros de Cartón, las canciones de José Pérez - de la Asociación Dominicana, los bailes del Grupo Rapa Nui de la Asociación de chilenos o la música étnica de Asociación de Residentes de Senegaleses, que fue la encargada de cerrar la muestra a partir de las nueve de la noche.