José Ramón Bauzá (PP) ha jurado hoy la Presidencia de la comunidad autónoma de las Islas Baleares, un cargo que ha calificado de «un grandísimo honor» y que ha dicho que ocupa con voluntad de «servicio» y de «ser algo así como el alcalde de las Islas Baleares».
En un acto celebrado en la Lonja de Palma ante unas mil personas y numerosas autoridades, entre ellas el presidente del PP, Mariano Rajoy y el ministro de Educación, Angel Gabilondo, Bauzá ha defendido que quiere «recuperar la confianza de la sociedad» en la clase política.
«No está permitido traicionar la confianza de las personas, de la sociedad, eso no puede volver a pasar», ha dicho Bauzá refiriéndose a la desconfianza generada por los casos de presunta corrupción. Se ha comprometido a trabajar «con honradez y lealtad», desde «la austeridad y el compromiso por hacer que las cosas cambien a mejor».
El nuevo presidente ha comenzado su discurso con una referencia a los soldados españoles heridos hoy en Afganistán, entre ellos una soldado del regimiento Palma 47: «les dedico un fraternal abrazo a todos los familiares y a todos los miembros del Ejército y a todos los desplazados que sirven a nuestro país, España, más allá de nuestras fronteras».
El mandatario ha manifestado su deseo de «ser algo así como el alcalde de Baleares» porque considera que la política municipal, en la que se inició hace 12 años en el Ayuntamiento de Marratxí, «es la más pura de las políticas por su cercanía, su exigencia, por la dedicación que requiere, la humildad, por el altruismo y la vocación de servicio».
Como ya hizo en el debate de su investidura en el Parlament, ha defendido la necesidad de «alcanzar pactos de estado en materias como la educación, el turismo, la economía y el territorio, porque es el momento de impulsar una estabilidad a largo plazo».
Bauzá ha subrayado que uno de sus principales objetivos será «tratar de que en las Islas Baleares se genere empleo» porque «hay demasiadas personas sin trabajo». «Quiero que las cosas nos vayan mejor», ha afirmado y ha señalado que ayudar a los empresarios y emprendedores para reactivar la economía y generar trabajo.
Otra de sus metas es mejorar la educación y que bajen la tasa de fracaso y abandono escolar «fomentando la cultura del esfuerzo».
En el ámbito de las políticas sociales, Bauzá ha defendido que los servicios sociosanitarios, con el PP, «están tan garantizados como si gobernara cualquier otro partido» y ha criticado los «titulares» que han dicho lo contrario.
En su opinión, la octava legislatura será «clave» para la transformación de la Administración, algo para lo que ha pedido que «todas las fuerzas políticas» trabajen «en el mismo sentido».
«No tengo más intención que cumplir con nuestro programa electoral», ha dicho Bauzá, que ha señalado que no tiene «ningún proyecto estrella bajo la chistera, no hay anuncios a bombo y platillo». «No habrá sorpresas porque nos las quiero», ha insistido.
Antes de finalizar su intervención, de unos veinte minutos, Bauzá ha agradecido a Rajoy su presencia por sus muestras de apoyo y confianza hacia su proyecto y hacia su persona.
«Es hora de ponernos a trabajar, no hay tiempo que perder en esta llamada al cambio», ha concluido Bauzá, que ha manifestado su esperanza de estar a la altura y contribuir a mejorar la sociedad.
Bauzá se ha convertido así en el quinto mandatario autonómico de Baleares en democracia, después de Gabriel Cañellas (1983-1995), Cristófol Soler (1995-1996) y Jaume Matas (1996-1999 y 2003-2007), todos ellos del PP, y el socialista Francesc Antich (1999-2003 y 2007-2011).
Entre los asistentes a la toma de posesión, que ha comenzado minutos después de las 19.00 horas, se encontraba el expresidente del Govern, Gabriel Cañellas, así como todos los consellers del nuevo ejecutivo que tomarán posesión de sus cargos el próximo lunes.