C. ROIG
La consellera de PSOE-Pacte Patricia Abascal acusó ayer al Consell de paralizar la reforma de la carretera de Sant Joan y no querer construir el carril bici. Abascal destacó que se trata de un proyecto listo para sacar a concurso, cuyas obras podrían empezar en un año. De hecho, desde PSOE-Pacte no entienden por qué ahora el equipo de gobierno quiere parchear la carretera y «gastar más dinero» en vez de seguir con la tramitación.
La consellera de Mobilitat, Pepa Costa, acusó a los progresistas de retrasar esta vía pese a contar ya con el informe de Medi Ambient desde abril. «¿Se paró la tramitación por las elecciones?», se preguntó Costa, que indicó que el modelo de vía no es el del PP y que primero quieren estudiar las 100 alegaciones de los vecinos. Asimismo, matizó que el parcheo que se hará no sustituirá el arreglo de la vía, que considera «prioritario».
Carril bici
Abascal replicó que esta vía se retrasó para priorizar la de Sant Miquel, que ya estaba en construcción y se preguntó por qué el PP tiene que revisar las alegaciones si ya están aprobadas. «¿Que se quieren cargar el carril bici? Pues díganlo y hacen el resto, porque pintarlo en rojo como quieren ustedes no es legal», dijo la consellera progresista. «El señor Tarrés, ese que lo hace todo mal según ustedes, consiguió 78 millones para el convenio de carreteras, espero que los gasten», añadió.
Pepa Costa la tranquilizó asegurando que no perderán la financiación. En este sentido, consideró que los progresistas no han sabido gestionar porque solo han justificado 400.000 euros por la vía de Sant Miquel y confió que esta poca actividad no implique una pérdida del convenio. Asimismo, denunció un desfase en la aplicación del convenio, ya que los tres proyectos que hicieron los progresistas (vía de Sant Miquel, de Sant Joan y variante de Jesús) ya suponen un coste de 9,7 millones más de lo que contempló el acuerdo con Madrid. Además, en esta cantidad también se incluía la carretera de Sant Eulària y la de Sant Carles.
Por otro lado, el PP votó sin entrar en el debate a favor de una moción presentada por PSOE-Pacte para que se mantenga la eliminación de after-hours que se pactó la pasada legislatura. La consellera progresista Pepa Marí mostró su preocupación porque un regidor de Vila planteó tocar este acuerdo, algo que «provocó disidencia dentro del PP».
Curso para discotecas
El Consell aprobó de urgencia una propuesta de las tasas que se cobrarán para dar formación a los controladores ambientales de las discotecas, un curso obligatorio que tendrán que hacer los porteros y personal de locales de ocio nocturno para evitar la violencia. Abascal consideró «muy buena» esta iniciativa, sobre todo tras la agresión de un portero del hotel Ushuaïa, pero pidió al Consell que reclame que esto lo pague el Govern. El conseller d'Indústria, Vicent Roig, dijo que estos cursos los darán centros habilitados a tal efecto que tendrá que inspeccionar el Consell y eso se financiará por cobro de tasas.
En el turno de preguntas, el vicepresidente Mariano Juan aseguró que no dejarán perder los 2,3 millones para la Escola d'Hoteleria en sa Coma, por lo que ya están redactando el proyecto.
Asimismo, el presidente Vicent Serra reconoció que los decretos de productividades firmado por Tarrés antes del cambio de gobierno no eran ilegales, sino que condicionaban la organización del Consell que él planeaba y por eso los anuló.
La consellera dice que es «difícil» exigir el dinero de turismo porque el Pacte no lo dejó
La consellera de Turisme, Carmen Ferrer, garantizó que el Govern hará una promoción turística específica de cada isla, por lo que rechazó una moción presentada por PSOE-Pacte que exigía reclamar al Govern que pague la partida comprometida para promoción para 2011. Asimismo, recordó que los progresistas no firmaron nada y que el dinero no estaba presupuestado. También dijo que con el déficit del Govern este punto es «de díficil exigencia». PSOE-Pacte lo consideró una «excusa» y le pidió que «en vez de defender al Govern defienda los intereses de Eivissa».