La Pimeef no es ajena a las dificultades económicas que están viviendo sus socios. Esta es la frase que resume el momento que atraviesa esta entidad en Eivissa, que ante los problemas económicos opta por seguir manteniendo buena parte de sus servicios y busca alternativas, como la firma de convenios con empresas para conseguir bonificaciones y descuentos especiales para sus asociados, por ejemplo.
A la espera de cerrar las cuentas de 2011, Mariano Riera, presidente de Pimeef, valora el año pasado como «complicado», aunque asegura que continúan trabajando como siempre para sus socios. «Nosotros, como todas las empresas, pasamos nuestras dificultades económicas. Cerraremos el año pasado con un pequeño déficit debido a que las pequeña y medianas empresas pasan por un momento muy delicado», explica Riera.
Uno de los principales problemas a los que se enfrentan es la financiación, pues los asociados tienen complicado acceder al crédito: «No somos ajenos a los problemas económicos de nuestros asociados y somos conscientes de que hay mucha gente que lo está pasando mal», precisa.
Los recortes
En 2011, Pimeef tuvo que tomar la decisión de reducir personal (de 18 trabajadores ahora hay 14), reducir los gabinetes, como el comercial y el de riesgos laborales que ofrecía gracias a los acuerdos que mantenía con el Govern y que éste ahora no puede asumir, y tener una única oficina, la situada en la Avenida Espanya (antes tenían otra en la calle Historiador José Clapés), aunque continúa teniendo en propiedad ambas. Aún así, siguen trabajando con energía para ofrecer servicios como el gabinete de autoempleo y la asesoría jurídica. «Seguimos tan activos como siempre», puntualiza Riera.
Una de las apuestas de Pimeef para hacer frente a la crisis pasa por la firma de convenios con empresas como Iberdrola para conseguir bonificaciones especiales para sus socios: «Estamos a punto, además, de sumarnos a un convenio que tiene la Pime de Catalunya con una compañía aérea que vuela a Eivissa y mediante el cual los socios de Pimeef tendrían descuentos».
El número de socios se ha visto resentido, pero en menor medida, pues han pasado de los 1.900 a los alrededor de 1.750 gracias a que han mantenido las mismas cuotas durante los años de crisis: «En estos cuatro años las cuotas anuales son de 300 euros a pagar en dos mensualidades semestrales». Debido a que muchas empresas han cerrado fruto de la presión económica, esta asociación se enfrenta a algunos impagos por parte de socios y de algunas empresas que han desaparecido. A estos hay que sumar los de las administraciones: «La media de días que tardan en pagar las administraciones es de 162 días. En Eivissa y Formentera no pagan antes de los 120 días e incluso tardan más de 162», cuenta el presidente de Pimeef.
«Somos los que estamos dentro de las ciudades y hacemos ‘barrio'»
Uno de los aspectos más complicados a los que se enfrentan este año es la posible liberalización de horarios que propone el Govern. Desde Pimeef tienen claro que esta medida perjudicaría muchísimo a los pequeños y medianos comerciantes. «Creemos que tener abiertos los domingos y festivos es un despropósito porque al pequeño y mediano comerciante no nos quedará nada. Estamos en clara desventaja con las grandes empresas. Y abrir más no significa que haya más caja. Es un tema complicado que hay que consensuar», explica Mariano Riera, quien espera que este año se produzca un relanzamiento económico y que haya mejores perspectivas que en 2011. Riera tiene claro que el pequeño y mediano comercio tiene que seguir existiendo: «Para ello nos tenemos que especializar. Somos los que estamos dentro de las ciudades, los que hacemos ‘barrio' y eso no se puede perder», concluye.