En más de 30 años habíamos abierto prácticamente todos los días pero al final no hemos podido más y tras hacer muchas cuentas hemos decidido echar el cierre definitivamente». Así se podría resumir el obituario de la librería Sa Talaia, uno de los negocios más queridos por todos los vecinos de Sant Josep, y que esta semana ha anunciado que cerraba sus puertas para siempre.
Atrás quedan periódicos, revistas, libros, cromos, material escolar, postales y hasta decoración de Navidad. Han sido muchos años y por eso prácticamente todo el mundo en el pueblo tiene buenas palabras para Pepa Minaya y Neus Tur, sus dos dueñas. «Somos cuñadas, y sobre todo amigas, pero al vernos pasar tanto tiempo juntas en la librería mucha gente del pueblo se pensaba que éramos hermanas», asegura Pepa entre risas mientras Neus atiende a una cliente que pregunta por unos lápices escolares.
Y es que a pesar de que han anunciado el cierre durante esta semana seguirán abriendo por las mañanas y atendiendo a clientes que aún no se acaban de creer la noticia de que la librería vaya a cerrar. «Nos cuesta mucho no venir porque este local ha sido nuestra vida desde que nos concedieron la licencia de apertura de un kiosco en la puerta de casa un 20 de junio de 1973, pero tras pensarlo muy bien y viendo que nuestros hijos tienen carrera y que ya vamos teniendo una edad, hemos decidido retirarnos e intentar adaptarnos a una nueva vida», afirmaPepa aún con cierta nostalgia en la mirada.
Además a todo esto se sumó que «desde hace tiempo debido a los cambios de la sociedad y a que, por ejemplo, la gente cada vez compra menos prensa porque la lee en internet, hubo un momento que el dinero que ganábamos apenas nos llegaba para cubrir gastos».
Sin embargo, y a pesar de que aseguran que se han dejado muchas horas en el local, Pepa y Neus guardan muy buenos recuerdos como «cuando Joan, un niño de Can Jordi, vino para darnos sus ahorros para que pudiéramos seguir abiertos, o cuando Michaud, un escritor y catedrático francés venía en verano y nos pedía todos los periódicos del año que le habíamos guardado para tener información de lo que había pasado en Eivissa».
Por eso ambas aseguran que durante estos días les embargan sentimientos encontrados de pena y emoción ante la decisión que han tomado. Una emoción que, además, se desbordó anteayer cuando todo el pueblo decidió darles una fiesta sorpresa para agradecerlas todo lo que han hecho por Sant Josep durante estos más de treinta años. «Fue increíble, lo más bonito que hemos vivido en nuestra vida, y por eso queremos agradecer a todos los que acudieron el martes hasta nuestra puerta por lo que nos prepararon», asegura Pepa aún emocionada al recordar una fiesta en la que hubo desde música pagesa hasta una poesía en su honor.
Fiesta sorpresa.
El martes los vecinos de Sant Josep se volcaron con Pepa Minaya y Neus Tur y les prepararon una fiesta sorpresa en la puerta de la librería. Hubo de todo, música pagesa, lectura de agradecimientos e, incluso, un poema dedicado enteramente a ellas. Normal que aseguren que ha sido uno de los momentos más emocionantes de sus vidas.
El dato - Una librería que vendía de todo
La librería Sa Talaia de Sant Josep es uno de los negocios que huelen a tradición con sólo acercarse al escaparate. Según los vecinos ha sido durante muchos años el lugar donde encontrar el periódico del día, todo tipo de revistas españolas y extranjeras, los cromos de la liga de fútbol, de Pokemon o Transformers, los libros de los colegios, lápices y calculadoras para los niños y mayores y, cuando llegaba Navidad, figuritas para el Belén y bolas para el árbol. Ahora todo está rebajado al 50% porque enseguida en ella no se podrá comprar ya nada.