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El Govern cifra en 300 millones de euros la reducción del gasto público en 2011

El vicepresidente económico, Josep Ignasi Aguiló (centro), realiza un comentario al president del Govern, José Ramón Bauzá (dcha.) durante el pleno del Parlament. | Pere Bota

| Palma |

El Govern cifra en 300 millones de euros la reducción del gasto general de la comunidad autónoma llevada a cabo desde que el PP rige el ejecutivo regional, según ha asegurado hoy el vicepresidente económico, de Promoción Empresarial y Empleo, Josep Ignasi Aguiló, sobre la liquidación de presupuestos de 2011.

«La reducción del gasto general de la comunidad autónoma llevada a cabo por este Govern supera los 300 millones de euros», ha asegurado Aguiló en respuesta a una interpelación del grupo socialista sobre la política de ocupación del ejecutivo.

La diputada socialista Lourdes Aguiló ha acusado al Govern de no haber aplicado «ninguna» medida de reactivación económica ni para activar la ocupación ni para reducir el paro.

Aguiló ha repetido hasta en tres ocasiones que en Baleares hay 98.927 parados y ha acusado al Govern del PP de no haber hecho nada para paliar esta cifra en los ocho meses que lleva al frente del ejecutivo autonómico.

La socialista se ha referido también a la reforma laboral del Gobierno central y ha acusado a los gobiernos del PP en Baleares y en Madrid de «aprovechar la crisis para recortar los derechos de los trabajadores que son los más débiles».

La diputada ha criticado la que considera una reforma laboral realizada «contra los trabajadores» y que «parece hecha con un bisturí fino porque afecta a toda la regulación laboral y la abre en canal de arriba abajo».

Ha augurado que puede producir más despidos, más inseguridad laboral y más dificultad para acceder al crédito, ha asegurado que la reforma «tiene como objetivo facilitar el despido y abaratarlo» y le ha reclamado al Govern que haga algo al respecto durante la tramitación de este cambio legislativo en el Congreso.

El vicepresidente ha replicado que las políticas del Govern para dar solidez a la economía se pueden resumir en dos: la racionalización del gasto público para hacerlo sostenible y «no ahogar a nadie», y reformas legislativas para que trabajadores y empresas puedan adaptarse a la nueva realidad que imponen las circunstancias y mejorar su competitividad.

El responsable económico del ejecutivo del PP ha acusado al anterior Govern del PSIB y el Bloc per Mallorca de haber incrementado el gasto en un 2,4 % y ha defendido que la actual política económica que aplica el PP «más seria y más sólida, que pueda dar resultado no solo para los tres próximos meses sino para los próximos 20 años».

El vicepresidente ha reprochado a sus antecesores que trataron de sustituir con gasto público la inversión privada. «Y así nos ha ido, así hemos llegado a las cifras que paro que hemos llegado y a las cifras de gasto público y a las cifras de deuda que son un problema para todos», ha incidido.

«Tenemos que hacer todo lo contrario y ganar futuro pagando las deudas para quitarnos de encima el endeudamiento que nos está amargando», ha defendido Josep Ignasi Aguiló.

El vicepresidente ha defendido la necesidad de acometer cambios legislativos para dar un vuelco a la situación y ha defendido que, en la comunidad autónoma, «no es fácil plantear reestructuraciones del sistema sanitario, cambios del sistema comercial y de la estructura de la administración pública, pero se debe hacer».

Entre las actuaciones realizadas ha mencionado la actualización de la ley general turística de Baleares para que la industria siga siendo competitiva y la propuesta de ampliar horarios comerciales de Palma.

Ha anunciado que en industria y energía «habrá medidas para facilitar la inversión y la actuación de los empresarios» y en el ámbito del trabajo se fomentará sobre todo la formación.

También ha dicho que el Govern ha puesto en marcha líneas de pago a proveedores, se han adelantado los anticipos correspondientes y se han abren líneas ICO.

Por otra parte, según Aguiló, las medidas que propone la reforma laboral «se están contaminando con un mensaje distorsionado que no ayuda a nadie» y ha negado que fomente del despido, sino la competitividad empresarial.

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