Los ataques a ganado que se han producido este fin de semana, no menos de cuatro entre la Mola y es Cap de Barbaria, están llevando a una situación límite la paciencia de la Associació de Ramaders de la isla que a través de su presidente, Andreu Ferrer, mostraba ayer su descontento por la falta de efectividad de las medidas que en teoría ha adoptado el Consell para combatir los ataques. Para Ferrer, hay algo claro y preocupante, ya que en 2011 «se sacrificaron un total de 122 ovejas y corderos a consecuencia de las heridas producidas por los ataques de perros, y muertas ya directamente por los ataques había alrededor de 90», explicó Andreu Ferrer, que no obstante precisó que las cifras las decía de memoria y podía haber una mínima diferencia con las finales.
«Los ataques al ganado es algo que se viene repitiendo una vez detrás de otra y si hasta hace unos años era una cosa que solía suceder a finales de verano, ahora se va repitiendo de forma continuada, nos hemos quejado por activa y por pasiva , pero no hay pausa», dijo Ferrer, que explicó que antes había una oleada de atques, se tomaban medidas y pasaba tiempo antes de que se reprodujeran, pero ahora no.
Censo identificativo
Por su parte el conseller d'Agricultura, Ramaderia, Pesca i Caça de Formentera, Santi Juan, reconoció que la situación es preocupante. «En 2011 hubo muchos ataques y se pudo parar la situación pero este año los ataques son continuos», por lo que se están tomando medidas para acabar con el problema siendo uno de ellos «la puesta en marcha de un censo completo de todos los perros de la isla que se está llevando a cabo desde hace cerca de dos meses». En este sentido, la Policía Local cuenta con una aparato lector de chip y cuando encuentran perros sin identificar deben llevarlos a la perrera e instalarles el chip para controlar propietarios responsables.
Hay ganaderos que se sienten desamparados ya que por el lugar en el que viven como en alguna zona de es Cap, los ataques de perros son continuos. Uno de ellos, aseguraba ayer que en los últimos dos años y medio ha sufrido más de una docena de ataques, cinco de los cuales en lo que llevamos de 2012.
Multa de 3.000 euros a un propietario
El conseller Santi Juan señaló que si hay perros sueltos en propiedad privada no se puede intervenir fácilmente por lo que señaló que «los propietarios deben ser conscientes de lo que supone tener perros, deben controlarlos y evitar que ataquen a los rebaños». Pero, como Ferrer, Juan ahondó en una cuestión básica «hay perros sueltos que nadie quiere denunciarlos, sin denuncias por sueltos o por ataques, no se puede actuar». Y al respecto Santi Juan avanzó que se han aumentando las sanciones sobre tenencias de perros y de tenerlos sin control y que hace pocos días un propietario fue multado con más de 3.000 euros.