Aunque no es la primera escala nocturna que recibe el puerto de Eivissa, sí que la del Costa Serena es la que más horas de noche pasa en la Isla. Este crucero, que partió de Roma hace siete días con 3.800 personas a bordo, recaló en el puerto de Vila a las tres de la tarde del miércoles para abandonar la Isla a las seis de la tarde de ayer. En total, 27 horas de escala en la que los pasajeros (principalmente italianos, franceses, alemanes e ingleses) pudieron ir de compras, de excursión por las playas e incluso hasta Formentera, visitar el ambiente nocturno del puerto de Vila y salir de fiesta por las discotecas. El Costa Serena hará un total de 15 escalas hasta septiembre. Todas ellas, superiores a las 24 horas.
«La noche en Eivissa se decidió para el Costa Serena, que es el crucero estándar de siete noches, y que está sobre todo orientado a los mercados italiano, francés, alemán e inglés y también español. Por ello se tiene en cuenta el gran atractivo que representa Eivissa y la noche ibicenca», explicó Bernardo Echevarría, director general de la compañía, que ofreció una cena a bordo del Costa Serena para dar a conocer los servicios y novedades de este cruceros. Al acto asistieron la consellera de Turisme, Carmen Ferrer; el presidente de Fomento del Turismo, Lucas Prats; el concejal de Turismo de Vila, Ignacio Rodrigo; el presidente de la Cambra de Comerç, Vicent Torres; y el delegado de Autoritat Portuària en Eivissa, Joaquín Jiménez. La importancia del total de horas en Eivissa radica en el gasto por turista, pues, según recordó Jiménez, un crucerista en Eivissa gasta una media de 120 euros en su estancia, lo que representa el gasto «más alto de Balears». «Es difícil que un crucero pase la noche en Eivissa porque la gente escoge generalmente segmentos donde navegue de noche y haga consumo a bordo para disfrutar del destino de día. En Eivissa, por la circunstancia de tener dos islas y por tener una noche conocida a nivel mundial, decidieron apostar por esta escala mixta que puede ser aprovechada tanto para hacer excursiones como para ir a alguna discoteca», explicó Jiménez, quien aseguró, además, que Autoritat Portuària está estudiando «alargar» uno de los dos pantalanes nuevos «con Duques de Alba» para permitir que dos cruceros de gran eslora (300 metros) puedan atracar al mismo tiempo. «Que es lo que el mercado europeo ahora está moviendo», precisó Jiménez.