Extrabajadores el Institut de Biologia Animal de Balears (Ibabsa), que han sido despedidos por la dirección de la empresa pública, alertaron ayer de que la reducción de personal provocará una disminución de los controles sanitarios animales necesarios para prevenir los virus en el ganado balear y las consecuencias que ello puede general en los humanos.
UGT advirtió ayer que el despido de 22 de los 53 trabajadores del Ibabsa pone en peligro la sanidad animal y a la seguridad alimentaria de las Islas porque «han desmantelado los recursos humanos que los garantizan» puesto que los trabajadores despedidos eran los encargados de llevar a cabo los controles sanitarios y la certificación.
La exdirectora del Ibabsa, Catalina Aguiló, afirmó que la seguridad en el control de epidemias como la peste porcina, la lengua azul y las vacas locas, quedará «comprometida».
Por su parte Jordi Rivas, responsable de empresas públicas de UGT, insistió ayer en que «dejar a la mitad de la empresa pública más antigua de Balears, comprometerá la seguridad alimentaria».
Rivas anunció ayer que UGT ya ha denunciado el «despido nulo de los 22 trabajadores» y que en septiembre presentarán una demanda por vulnerar el derecho fundamental a la negociación colectiva, al entender que el Govern ha violado la Constitución Española.
El exjefe del Departamento de Sanidad Animal del Ibabsa, Pep Cerdà, explicó que con la eliminación de las granjas centinelas, que informaban de la evolución de la población de moscas y virus circulantes, se tardará en obtener los datos necesarios para el control de alarmas.
El aún presidente del Comité de Empresa de Ibabsa, José Manuel Alanzor, ha puntualizado que además del «riesgo sanitario» que los despidos pueden ocasionar, se ha negado el derecho de negociación colectiva y ha criticado el cierre de Ibabsa en Eivissa sin planificar quién se encargará ahora de estas funciones.