El alcalde de Sant Joan, Antoni Marí, Carraca, salió ayer al paso de las acusaciones del portavoz de PSOE-Pacte, José Luis Rodríguez, quien pidió hace unos días su dimisión por el caos que se forma en Benirràs los domingos y por el peligro de incendio que supone que los asistentes a la fiesta de los tambores enciendan hogueras en la playa.
Marí reconoció estar «preocupado seriamente» y calificó el problema de «grave», pero defendió que tienen un presupuesto limitado y no pueden contratar a más agenets. Los domingos tienen a tres de los cinco policías locales del municipio destinados a la playa, que básicamente se dedican a controlar el tráfico. «Lo que me dicen los municipales es que no pueden descuidar el tránsito, porque si se bloquea la carretera puede pasar cualquier cosa. El otro día tuvo que entrar una ambulancia y no hubo problema ninguno, lo importante es la seguridad de la gente», explicó el alcalde, que añadió que también suele haber dos patrullas de la Guardia Civil.
5.000 personas
PSOE-Pacte criticó que la policía no baja a la playa, donde hay venta ambulante y hogueras. Según Carraca, su intención también es controlar la venta ambulante, pero el domingo se juntan en la playa 5.000 o 6.000 personas y la Policía tiene que priorizar que Benirràs «no quede aislado». «Pedir la dimisión queda muy bien, pero el señor Rodríguez tendría que ser más serio y no hacer política barata», indicó el alcalde, que recordó que hace años la izquierda le llamó «fascista» por intentar controlar la fiesta de los tambores.
Marí remarcó que esta misma semana han levantado actas por venta ambulante y que también ha hablado del problema con la Dirección Insular para que la Guardia Civil conozca lo que ocurre. «Les he explicado lo que pasa, pero no puedo decirle a un teniente o a un capitán que baje a la playa porque ellos saben cómo tienen que hacer su trabajo», añadió el alcalde, que se preguntó si Rodríguez habrá hecho un curso de policía acelerado por sus críticas a la actuación policial.