Los vecinos de Sant Rafel pueden conectarse desde hoy a la red pública de saneamiento y abastecimiento de agua potable, que han puesto en marcha el Ayuntamiento de Sant Antoni y la empresaria concesionaria Aqualia a través del primer pozo municipal de Can Sacosta, que suministrará agua a todo el caso urbano.
La población de Sant Rafel siempre se ha abastecido de pozos y depósitos de captación privada porque aunque existe una red pública no se encontraba operativa. Ahora, mediante la construcción del depósito regulador y su puesta en servicio, en las próximas semanas se podrá suministrar caudal directamente a la red pública.
En principio, Aqualia calcula que tiene 150 clientes «potenciales» entre los residentes del pueblo. Sin embargo, «el pozo está preparado para suministrar en un futuro la zonas de los bomberos, de Montecristo, y también a la zona del Club Sant Rafel», aseguró ayer la alcaldesa, Pepita Gutiérrez, durante la presentación que tuvo lugar en el mismo pozo de Can Sacosta, y en la que estuvieron presentes los concejales de Gobernación, Xicu Cardona, y de Obras, Vicente Costa Maymó, y responsables de la empresa Aqualia.
La primera edil explicó que esta obra se empezó «hace cuatro o cinco años, en época de Pepe Sala, en la legislatura anterior» y destacó la «importante» inversión de 355.000 euros que hizo el Consistorio para acometer las obras, que consistieron en «la adecuación del terreno y del pozo, de los dos depósitos de 40 toneladas cada uno, y la instalación de la red de bombeo y de cloración del agua, y la distribución hacia los vecinos», agregó Gutiérrez.
«Controles sanitarios»
«Es una buena noticia para todos los vecinos porque realmente será una comodidad poder acceder y conectarse a la red de agua corriente. Les favorece porque tendrán los mismos precios que los vecinos de Sant Antoni y no tendrán que pagar un extra. Será la conexión normal y habitual», destacó la alcaldesa, ya que aquellos que quieran conectarse se sumarán a los cerca de 15.000 habitantes del municipio que ya reciben agua de la red pública que gestiona Aqualia.
«El poder aportar un sistema de abastecimiento de garantía pública, con todos los controles sanitarios, es una mejora notable para el núcleo de Sant Rafel y el término municipal de Sant Antoni», destacó, por su parte, Eduardo del Castillo, director de la delegación de Aqualia en Balears, presente ayer en el acto.
El servicio se pondrá en marcha en pocas semanas. Sin embargo, los vecinos interesados podrán iniciar los trámites para conectarse a las redes de abastecimiento y saneamiento a partir de hoy, tanto en la oficinas de Atención al Cliente de Aqualia en Sant Antoni (C/ del Far, 4ºB) de lunes a viernes de 9,00 a 13,00 horas, como en las oficinas de Can Portmany los martes y jueves de 8,00 a 10,00 horas.
El pozo municipal podrá sumarse a la interconexión de las desaladoras
Aunque este es un pozo de agua «puro y duro», como lo calificó la alcaldesa, Pepita Gutiérrez, cuenta con un sistema para que siga suministrando cuando se ponga en marcha la interconexión de las desaladoras, «que también se hará en un futuro», destacó Gutiérrez.
Asimismo, la alcaldesa explicó que aunque «se abre la posibilidad para que se conecten a la red pública», los demás pozos privados podrán seguir suministrando o tener «algún otro tipo de salida».
Cabe destacar que la falta de conexión de los vecinos a una red municipal había sido criticada por la oposición, PSOE-Pacte, debido a que hasta el momento ninguna vivienda de Sant Rafel contaba con la posibilidad de conectarse a la red municipal de distribución de agua potable, a pesar de que los sucesivos equipos de gobierno habían prometido en reiteradas ocasiones que esta deficiencia se solucionaría de forma inmediata.