Autoritat Portuària de Balears (APB) reveló ayer que la licitación de las obras de la reforma del puerto de Eivissa podría arrancar antes de que se acabe el año, pero para ello es necesario que «el Ayuntamiento de Eivissa y el Consell» se decidan este mes de septiembre por una de las tres opciones para el tráfico entre las Pitiüses. En este sentido, un portavoz del gestor portuario destacó ayer que la alcaldesa de Eivissa, que representa a la Isla en el Consejo de Administración de la APB, transmitió al presidente de esta entidad «el debate y las posiciones de cada una de las partes, así como el el papel del ayuntamiento en este debate durante los últimos meses», pero que no le hizo saber una «propuesta formal» sobre qué opción es la que escogerían. «Podríamos empezar la licitación de las obras este año, pero para ello es necesario que quede clara la opción antes de que acabe septiembre; esto es importante. Además, hay que ajustar el proyecto básico a la propuesta elegida, por lo que hay que tener en cuenta que hay también un trabajo técnico», precisó este portavoz de la APB
Las tres propuestas que se barajan para el tráfico entre Eivissa y Formentera son que los pasajeros estén en la zona del martillo y los barcos de carga en los muelles comerciales (implicaría la presencia de tráfico rodado, aunque menos que en la actualidad), que los pasajeros y las mercancías vayan a los muelles comerciales y, por último, que tanto pasajeros y mercancías se trasladen a Botafoc.
Cabe destacar que en el marco del Consejo de Administración que se celebró ayer, la APB aprobó otorgar a la empresa Sovalgaray Marítima, SL la explotación de un edificio para aparcamiento, locales y despachos situado en el puerto de la Savina. Se trata de la construcción de un nuevo edificio de tres plantas, sótano y cubierta en una parcela de 1.390 metros cuadrados.