El portavoz de los socialistas en el Consell de Mallorca, Jaume Garau, ha denunciado hoy que el PP «abandona a las personas dependientes», puesto que en un año y medio de legislatura popular hay 287 personas menos con el derecho reconocido por la Ley de dependencia y 496 que han perdido la prestación.
El PSIB ha destacado a través de un comunicado que según los datos oficiales del Imserso, en junio de 2011, tras el gobierno socialista, había 16.414 personas con el derecho reconocido a la dependencia en Mallorca frente a las 16.127 personas contabilizadas en octubre de 2012, por lo que existen 287 personas menos, algo que Garau atribuye a la «pasividad y dejadez del PP».
Garau ha lamentado que el PP «paralice todos los trámites» para aplicar la Ley de Dependencia, un hecho que se percibe en la disminución de las personas que reciben la prestación, que han pasado de 10.166 en junio de 2011 a 9.670 en octubre de 2012, un total de 496 personas menos.
Para el portavoz socialista, otro dato «muy preocupante» es la reducción «drástica» del número de familiares cuidadores que han pasado de los 7.475 del 2011 a los 6.807 en la actualidad, una reducción de 668 personas en un colectivo al que además se le ha bajado el sueldo un 15 % y que ya no cotizará a la Seguridad Social.
Garau ha lamentado también «el poco interés» del PP en invertir en la rehabilitación de residencias de gente mayor que son propiedad del Consell, ya que durante la pasada legislatura se destinaron 4,6 millones de euros a las residencias del Llar d'Ancians, la Bonanova, Felanitx y Huialfas, mientras que durante el mandato de la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, solo se ha invertido la «ridícula cifra» de 20.701 euros.
El portavoz del PSIB en el Consell ha criticado que el PP continúa «atacando» a los más débiles con sus recortes que aumentan las dificultades de los que más necesitan el apoyo de la administración pública y de los servicios sociales.
Garau ha afirmado que los socialistas son los que más han invertido en residencias públicas y ha advertido al PP de que no puede poner «la excusa de la crisis» económica para dejar de hacerlo.